Real Madrid y Atlético ya se han 'prestado' el estadio otras veces...
Cerezo le ha ofrecido el Metropolitano a los blancos, que tienen el Bernabéu en obras y acabarán la Liga en el Di Stéfano. Si se diera, no sería la primera vez que uno le deja el estadio al otro...
El ofrecimiento de Enrique Cerezo del Wanda Metropolitano al Real Madrid para que puedan jugar como locales (y con público) en la casa rojiblanca ha chocado mucho entre las aficiones de uno y otro club. La posibilidad de ver a los de Zidane proclamándose campeones en el estadio colchonero no agrada a la mayoría. La medida, de llevarse a cabo, sería algo excepcional, pero no un hecho inédito entre los vecinos. A lo largo de sus más 100 años de historia, ambos han ejercido de anfritrión y de invitado para el otro en más de una ocasión y en varios recintos.
El Stadium Metropolitano que el Madrid rechazó
En esta ocasión en realidad no llegaron a compartir casa, ambos como inquilinos, pero estuvieron a punto. En 1923 se inauguró en Madrid el Stadium (se le llamaba Metropolitano porque lo construyó la Compañía Metropolitana, la que hizo el metro entonces) y el plan de los dueños es que allí jugarán el Atlético (aún Athletic), el Racing, la Gimnástica, el Unión Sporting y el Real Madrid. Sin embargo, los blancos, que buscaban un nuevo campo porque O’Donnell se había quedado pequeño, rechazaron esa idea y se desmarcaron para irse a Chamartín. El Atlético sí se quedó y a los pocos años ya era el único equipo que jugaba allí, pues los otros tres fueron desapareciendo.
Tras la Guerra, Chamartín acogió al Atlético
La Guerra Civil dejó prácticamente destruido el Stadium Metropolitano, situado en zona de batalla. Así, cuando regresó la competición, el Atlético no tenía dónde jugar, pues Vallecas, su segunda opción, tampoco estaba acondicionado para el fútbol. El Real Madrid aceptó que el Atlético jugara en Chamartín a cambio de que los socios blancos pudieran entrar gratis a los partidos. Eso ocasionó más de un problema, con abucheos de la grada, contestaciones de los futbolistas, multas… Con todo, pese a que el ambiente no era el más amistoso, el Atlético Aviación jugó todos sus partidos como local (menos el último, que ya fue en Vallecas) en Chamartín y se proclamó campeón de Liga.
Y en los 40, el Madrid jugó en el Metropolitano
El 15 de mayo de 1946 se empezó a derribar el viejo Chamartín y, mientras se construía el nuevo estadio blanco, el Real Madrid jugó como local en el Metropolitano. El mismo caso que el anterior, pero a la inversa. También los socios del Atleti entraban a los partidos del vecino rival. El Madrid disputó entera la 46-47 y cinco partidos de la siguiente, hasta que en diciembre del 47 se inauguró el Bernabéu.
El Bernabéu fue sede rojiblanca para Europa
El Atlético estaba ya trabajando en la construcción de un nuevo estadio, pues el Metropolitano se había quedado obsoleto, sobre todo en esos tiempos en los que empezaba a ser importante la televisión. Por eso, los rojiblancos jugaron algunos partidos europeos en el Bernabéu. Javier Barroso, presidente del Atleti, tenía buena relación con Bernabéu y le pidió ese favor. Así, el feudo blanco se jugó el Atlético-Nuremberg, semifinales de la Recopa 62-63. Ante 100.000 personas, mayoría rojiblanca, pero también mucho madridista. El Atleti ganó y pasó a la final. Muchos llegaron a plantear: ¿y si en vez de construir un nuevo estadio (el Calderón) lo comparte con el Madrid? Al año siguiente se repitió, con un Atlético-Juventus de Copa de Ferias, pero los rojiblancos estaban en horas bajas y las gradas se quedaron a medias, con los madridistas animando a la Juventus por Del Sol. Si quedaba alguna duda, el Atleti se convenció de que necesitaba su propia casa.
Del Bosque debutó en el Calderón
En la 93-94, un naranjazo a un juez de línea en un Real Madrid-Tenerife de Copa propició el cierre del Bernabéu. Así, en el siguiente partido en casa, el equipo blanco recibió al Rayo Vallecano en el Vicente Calderón. Ese 12 de marzo del 94 fue, además, el estreno de Del Bosque como entrenador del Real Madrid. Pese a no ser su hogar habitual, el equipo blanco ganó 5-2.
El Atleti recurrió a La Peineta… y al Bernabéu
Empezaba la 1996-97 y el Atleti, como vigente campeón de Liga y Copa, estaba de reformas en el Calderón. La temporada empezó con la Supercopa y los rojiblancos jugaron como locales en La Peineta, el origen del Wanda Metropolitano. Curiosamente, la ida en la casa del Barça tampoco fue en el Camp Nou, sino en Montjuic. Para cuando empezaba la Liga, el césped del Calderón seguía sin estar, así que el Atleti tuvo que comenzar en el Bernabéu ante el Celta (2-0). Los rojiblancos pagaron por el alquiler, pero Gil quedó encantado: “Los empleados me han demostrado que son gente muy maja. Me he sentido como en casa”.