Vitolo, pruebas médicas
El canario fue de nuevo ausencia en la sesión del Atlético hoy en el Cerro. Los médicos valorarán el alcance de su lesión, que a priori no es grave.
Persiguen las lesiones a Vitolo como las pesadas cadenas de hierro a una condenado. Cuando asoma el recomienzo de la temporada, zas, otra vez el mordisco atrás, la enfermería, el eterno volver a empezar para él una rutina desde que hace tres veranos cambiara Sevilla por Madrid. Su manera de salir, traumática, quizá fue lo que convirtiera sus músculos en porcelana. Antes de aquello las lesiones siempre le ocurrían a otros, no a él, después, innumerables. La última, en la sesión de ayer, que Vitolo no pudo terminar con el resto de sus compañeros en el Cerro. Hoy se determinará su alcance.
Porque Vitolo volvió a ser ausencia en el trabajo del Atlético esta mañana y, una vez finalice éste, será sometido a pruebas médicas para decretar el alcance de su lesión. Muscular, no parece grave pero quizá sí lo suficiente para impedirle disputar los primeros partidos de este maratón que viene para finalizar LaLiga y que durará apenas un mes. Cuando esté a punto puede que todo haya ya terminado.
Tercera lesión de la temporada
La lesión es la tercera del canario esta temporada que la comenzó imparable, recordando más que nunca a aquel futbolista que se fichó del Sevilla. Todo garra y pase, conducción. En venta durante todo el verano, logró convencer a Simeone desde la hierba que tenía un hueco en el once. Y lo alcanzó, hasta caer de nuevo lesionado, que desapareció. En diciembre, cuando había vuelto, otra vez. Y ahora. Así desde hace tres años. Una tortura para un futbolista de talento y condiciones incuestionables. Pero ese ruido de cadenas no se va, siempre acompaña en el Atleti.