Quince días para definir el modelo de gestión grana
La entidad entra en la cuarta y última fase de la ampliación de capital con más de 1.500.000 euros por cubrir. El modelo alemán, por el que apuesta el Consejo, principal escollo para posibles inversores.
Los aficionados del Real Murcia vivirán dos semanas en las que estarán pendientes de la web oficial. No porque esperen un fichaje o una renovación, sí porque en la misma hay un contador en el que se indica la cantidad alcanzada en la ampliación de capital. En estos momentos la cifra es algo superior a los 760.000 euros, muy lejos de un objetivo que estaba fijado en 2.300.000 de euros. A pesar del mal resultado, los gestores se pueden dar por satisfechos ya que si no llega a ser por la campaña realizada por sus aficionados en redes sociales los ingresos serían mucho menores. En el momento de la acción se rondaban los 350.000 euros.
Fue precisamente el movimiento de los aficionados lo que generó ilusión en atraer a inversores que cubran el millón y medio que resta o parte del mismo. Pero estos, que son varios según el presidente Francisco Tornel, no parecen estar dispuestos a entrar en el accionariado si no es para tomas las riendas del club. Y aquí está el principal escollo. El actual Consejo de Administración apostó en su día por el modelo alemán, en el que ningún accionista podría acumular más del 49% de las acciones. Aunque Tornel aseguró que si llega alguien con un acuerdo con Hacienda "nos iremos en un minuto y haremos que se haga mínimo con el 51% de las acciones", la idea de los gestores es ser fieles a sus 'principios'. Por ello estudian otra posibilidad, que es la de que empresarios aporten pequeñas cantidades de dinero y ellos seguir al frente del Real Murcia.
Hay muchas dudas en el entorno, todo puede pasar en estos días. Desde que nada cambie a que se dé un giro total en Consejo de Administración, algo que por cierto también quiere hacer Francisco Tornel cuando acabe la cuarta ampliación si él sigue siendo el máximo accionista. Muchas miradas están puestas en Alfonso García, ex propietario de la UD Almería, pero al que no terminan de convencer las exigencias del Consejo: invertir en la cuarta fase y acuerdo con Hacienda. En cuanto a meter dinero en la última fase, su gasto sería mayor ya que la prima de emisión es doble. Si, por ejemplo, quiere hacerse con el millón y medio que resta, deberá pagar tres millones. Sobre el entendimiento con Hacienda, su entorno consideran que el beneplácito llegaría con el pago de unas cantidad elevada (teniendo en cuenta que la deuda es de 11 millones) y eso mermaría la inyección en el apartado deportivo, donde el objetivo sería lograr el ascenso al fútbol profesional.