FIFA suspende al presidente de la Federación de Haití, investigado por abusos sexuales

FIFA ha decidido suspender provisionalmente a Yves Jean-Bart, presidente de la Federación de Fútbol de Haití desde hace 20 años, que está siendo investigado por presuntos abusos sexuales. La información fue destapada por el Guardian hace unas semanas en una noticia en la que recogía diversos testimonios de jugadoras que se quejaban de haber sido forzadas a mantener relaciones sexuales. "De conformidad con los artículos 84 y 85 del Código de Ética de la FIFA, la cámara de investigación del Comité de Ética independiente ha suspendido provisionalmente al Sr. Yves Jean-Bart, Presidente de la Federación Haitiana de Fútbol (FHF) de todas las actividades relacionadas con el fútbol por un período de 90 días. Esta sanción se ha impuesto en relación con las investigaciones en curso sobre el Sr. Jean-Bart. La sanción provisional entra en vigencia de inmediato", ha publicado FIFA este lunes.

Las acusaciones suponen un golpe duro para la FIFA y más tras haberse producido un caso similar hace un año en Afganistán. El máximo organismo del fútbol mundial no solo había prometido medidas para erradicar este tipo de delitos, sino que había puesto el Croix Des Buquets, el centro de entrenamiento de Haití donde supuestamente se han producido los abusos sexuales, como un ejemplo para el desarrollo de las regiones empobrecidas. De hecho, Infantino llevó un cheque de 500.000 € en 2017 para reparar las instalaciones, dañadas por un huracán a principios de año.

Según informa el Ny Times, el Comité Ético de la FIFA ha abierto una investigación para comprobar si las acusaciones de las jugadoras son ciertas. Varios miembros de la selección de Haití también han declarado a varios periódicos que han sido amenazados de muerte para retirar las acusaciones contra Bart, figura reconocida dentro del fútbol caribeño y que lleva más de dos décadas al frente del fútbol de Haití.

Una jugadora, cuya identidad es anónima, explicó a The Guardian las atrocidades cometidas por Bart: “Intentó violarme cuando estaba en el centro. Se acostó con algunos de mis amigos. También intentó tener hijos con algunas de las chicas. No solo se trata de abuso sexual, sino de abuso moral, económico… Ese hombre arruinó mi vida”

Otra de las técnicas de Bart era la de amenazar a las jugadoras de las inferiores de la selección con retirarlas las becas de fútbol que concede la Federación si se negaba a tener relaciones sexuales con el presidente. Las acusaciones han sido negadas en su totalidad por Bart, que está en medio de un proceso para ser reelegido por sexta vez consecutiva y considera que las acusaciones son un complot para perjudicarle en la votación.

“Mi oportunidad de jugar en el extranjero dependía de dormir con el presidente”, dice otra jugadora anónima. En Haití, las mujeres tienen serias dificultades para acceder a la justicia y la violencia de género no es un problema asentado en la sociedad. El país no cuenta con legislación específica en violencia de género, acoso sexual o incluso violencia doméstica. En 2017, el Ministerio de Salud de Haití emitió un informe en el que explicaba que una de cada ocho mujeres había experimentado violencia sexual en algún momento de sus vidas.

Por su parte, las organizaciones de mujeres de Haití instan al Ministerio de Justicia a tomar medidas urgentes. “Es absolutamente esencial proteger a las niñas y garantizar su anonimato. Estamos preocupados por su seguridad”. Una seguridad que la FIFA no ha cumplido a pesar de haber prometido garantizar el derecho y la integridad de todas las Federaciones de Fútbol. Dispone de una reserva insuficiente para investigar los casos de delito sexual y varias organizaciones de defensa del fútbol femenino ya han pedido que se aumenten los fondos destinados a investigar este tipo de casos. De hecho, para revocar a Keramuddin Karim, expresidente de la Federación de Afganistán de fútbol, hubo bastantes complicaciones para investigarlo debido a la poca atención que la FIFA había prestado a estos delitos. Bart ya ha confirmado que investigará las acusaciones contra él.