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Las Palmas

Cuando 20 años no son nada

Este jueves se cumplen dos décadas del quinto ascenso de la UD Las Palmas a Primera División. El equipo fue, además, campeón de Segunda División.

Cuando 20 años no son nada
ELVIRA URQUIJO A.EFE

Fue el Estadio Insular, epicentro del barrio Ciudad Jardín, emblema de Las Palmas de Gran Canaria, acaso el icono por excelencia del deporte canario, un escenario de leyenda y leyendas. Tantas tardes de gloria, menos decepciones, tantos momentos inolvidables. Como el vivido hace 20 año en pleno corazón de la capital insular.

Llegaba el Elche dispuesto a chafarle a la Unión Deportiva, con Sergio Kresic al mando, una fiesta segura. Ocurría que, si Las Palmas ganaba y el Salamanca no se imponía al Badajoz, matemáticamente sería equipo de Primera División luego de una trayectoria sólida, llegando en el mejor momento posible cuando más importante era estarlo. No quisieron los pupilos del entrenador croata dejar los deberes para el final y, con la victoria por 4-1 ante el conjunto ilicitano, rubricaban el quinto ascenso de la UD a Primera División tras el empate a dos goles en el otro partido que se vivió como propio.

Kresic alineó aquel día a un equipo que se recitaba casi de memoria: Cicovic; Jaime Quesada, Ramón, Sarasúa, Paqui; Pablo Lago, Jaime Molina, Samways, Jarni; Renaldo y Eloy. Los goles los marcaron Sarasúa, Eloy (2) y Lago. Asimismo, jugaron Sequeiros, Orlando y Jorge Larena, que curiosamente debutó ese día con el primer equipo amarillo.

Los dos últimos partidos, ante Villarreal (1-1) y Levante (2-1) fueron de puro trámite. Las Palmas, además, se coronó campeón de Segunda División con 72 puntos, cinco más que el Osasuna y seis más que el propio Villarreal.

Fue esta la última gran alegría del inolvidable Estadio Insular, hoy convertido en parque urbano, antes de su cierre el 29 de junio de 2003. Pero, desde tres años antes, Kresic ya se había ganado por derecho propio un puesto en el Olimpo de la UD Las Palmas, tan concurrido siempre. Duró una temporada más, en la que incluso consiguió una permanencia incontestable en Primera División, 11º clasificado, antes del desastroso curso siguiente. Volvió el entrenador croata para el curso 2009-10 buscando otro ascenso a Primera diez años después. El sueño se desvaneció pronto, sustituido en abril por Paco Jémez con el equipo a dos puntos del descenso.

Hace 20 años, donde hoy hay césped, un parque infantil, algún bar y espacios para hacer deporte y algún lastimosos recuerdo de un pasado futbolero infinitamente mejor que el titubeante presente, se produjo la última gran invasión del insular. Parece que fue ayer. Y es 20 años no son nada.