"La final de Copa y la salvación en el campo del Bayern son dos de los partidos de mi carrera"

Bojan Krkić (29 años) atiende a As de la única forma que hoy se puede hacer: por videollamada. Al jugador ilerdense le ha pillado la pandemia en Montreal, su casa desde el verano pasado cuando firmó por el Montreal Impact. Es una charla para recordar aquella final de Copa del Rey que alzó en 2009 gracias, en buena medida, a su gol de la tranquilidad ante el Athletic, pero tampoco esquiva otras cuestiones de su pasado y desvela los jugadores y técnicos que le han marcado.

¿Cómo lleva el confinamiento en Canadá?

Estoy con mi chica y la verdad que muy bien porque en Montreal no nos han encerrado y nos han dado libertad. Para mí ha sido importante poder mantenerme físicamente. Nos da esta posibilidad, que es de agradecer.

¿Allí las medidas son más suaves que en España?

Aquí se cerró toda la misma semana que en España. La liga igual. La diferencia es el número de infectados. Apenas hemos tenido casos.

¿Ha estado entretenido en casa?

Sí. Lo bueno es que me he planificado muy bien los días. Por la mañana hablo con mi gente en España porque es el momento bueno por la diferencia horaria. Cocino, hago deporte y ahora he empezado un curso online de gestión deportiva (en el Johan Cruyff Institute)

¿Ha sido duro volver a hincar los codos?

Lo llevo muy bien porque voy a hacer algo que llevaba años intentando hacer. Me quiero formar en algo que me llena, me refuerza y me suma. Y más en esta situación que estás sin poder jugar al fútbol.

¿Se pone muy pesado Henry?

No, la verdad es que no. Hemos hecho un par de llamadas a nivel grupal para ver cómo estamos. Pero somos los suficientemente profesionales para afrontar esta situación.

¿Ha notado algún cambio del Henry futbolista al Henry entrenador?

Son dos etapas diferentes. Una cosa es Henry como compañero de equipo y esa etapa fue inolvidable porque fue una de las personas que más me influenció y más me ayudó en los inicios. Y ahora vivo la etapa de Henry entrenador. Todavía no hemos tenido mucho tiempo para poder vivirlo porque empezamos el 10 de enero y la liga se paró en marzo.

Ha jugado en la liga española, italiana, holandesa, inglesa… En equipos de primer nivel y en equipos más modestos. ¿Qué le han enseñado clubes tan grandes como el Barça, Milán o Ajax y qué ha aprendido en otros más modestos como el Stoke o el Alavés?

La responsabilidad que te aporta un grande. La necesidad de ganar cada partido, la exigencia de ganar títulos… Esa es la parte que todos firmaríamos. Tienes a los mejores jugadores y peleas por objetivos más grandes. Y en los modestos te formas y aprendes a competir. Tienes tus objetivos y debes pelearlos. En el Stoke, por ejemplo, competíamos contra todos los equipos y terminamos noveno y estas cosas lo saboreas más.

¿Saborea más las victorias con los modestos?

En el Mainz estuvimos peleando para salvar la categoría hasta le penúltima jornada y cuando lo conseguimos (gracias a su gol y que le convirtió en el primer español en marcar en cuatro de las grandes ligas) fue una gran celebración. No es lo mismo estar en un equipo que aspira a la liga que salvar la categoría. El hecho de vivir estas experiencias y lograr resultados importantes con el Mainz me dio mucho.

Regresemos al pasado. Se cumplen hoy once años de aquella final de Copa ante el Athletic. ¿Qué recuerdos guarda de aquella noche en la que marca el 1-3 de la tranquilidad?

Recuerdos inolvidables. Son de los días más importantes de mi carrera. Por cómo venían el año y la Copa. Estaba jugando casi todos los partidos del torneo, marcando goles y con mucha ilusión. Era mi primera final con el primer equipo. Desde el hotel ya lo recuerdo como una fiesta que además me fue bien en lo personal. Fue una fiesta y con la aportación de mi gol resultó ser especial.

Empiezan perdiendo y en el segundo tiempo remontan. ¿Recuerda qué dijo Guardiola en el descanso?

Exactamente no. Sí que recuerdo la sensación del equipo. Habíamos empatado antes del descanso y se respiraba la fortaleza de cuando sientes que puedes ganar el partido.

¿Es su noche más feliz o es incomparable a una Champions?

Es incomparable. El partido con el Mainz contra el Bayern que te he comentado es otro momento, pero obviamente la final de Copa es muy especial e inolvidable.

Ese día marca Messi el 1-2 y usted mata el partido tres minutos después. Siguiendo de nuevo los pasos de Messi… ¿Le ha marcado o le ha llegado a cansar que le compararan con Messi?

Sí. Son las etiquetas que hoy en día por desgracia te ponen por querer ser el primero en decirlo. En su momento se hizo conmigo y hoy se sigue haciendo. Hay que aprender a vivir con ello. Más bien a aislarte. Esto no depende de ti y si no puedes sostener esto te puede llegar a influir en relación con el exterior.

Ampliar

Pasó por todas las categorías del Barcelona con gran éxito (423 goles) y batió varios récords de precocidad. ¿Cree que todo hubiera sido más fácil si se hubiera quedado en el Barça?

Estos días tienes más tiempo de analizar tus vivencias y me he dado cuenta de que estoy orgulloso de todas las aventuras que he vivido. Tanto positivas como negativas. ¿Si me imagino jugar en un solo equipo? Sí, tiene su parte bonita. Pero si ahora me das a elegir jugar toda mi vida en un equipo no cambiaría mis decisiones.

Usted debuta muy pronto en el primer equipo. ¿Cree que es peligroso ir tan rápido en el fútbol en el ámbito personal?

Igual peligroso es potente. Pero sí. Cuando entré con 16 años al vestuario del primer equipo no es algo que decidiera yo. Lo decide un entrenador porque cree que tengo el potencial para competir. La parte personal es muy diferente. Estaba preparado profesionalmente, pero personalmente no estaba para muchas situaciones. Esto te obliga a crecer quemando muchas etapas y coordinando situaciones con 16 años. Lo haces a un ritmo muy rápido y a veces no estás preparado, pero eso te forma para introducirte en la vida.

¿Qué jugador le ha sorprendido para bien en un club que no sea el Barcelona?

He jugado con compañeros muy buenos, pero creo que Totti. Eran sus últimos años cuando llegué y aun así seguía jugando a un nivel muy alto. Robinho tenía una calidad espectacular y con Marko Arnautovic ha sido con los que mejor me he entendido…

¿Y con qué entrenador se queda?

Con Rijkaard. Él da lo que no vemos hoy. Vemos entrenadores que dan oportunidades, pero no vemos entrenadores que den continuidad. No solo me dio la oportunidad de debutar en el primer equipo, me dio continuidad todo el año. Por eso he aprendido tanto de él y no solo en lo deportivo.

Un misterio que Rijkaard se haya apartado de la primera línea…

Hay tantas cosas que no sabemos… Lo mismo no necesitaba más. A lo mejor dio importancia a otras cosas y apostó por ellas.