NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

ESPANYOL

La (des)escalada del Espanyol

En grupos de ocho, tres por la mañana y uno de tarde, inician los pericos su misión de la permanencia y de evitar lesiones tras ser los más perjudicados por la COVID-19.

11/05/20 RCD ESPANYOL
 
 FOTO CARLOS MIRA
Carlos MiraRCD Espanyol

Es tristemente la palabra de moda. Desescalada. Y, aunque en cierta manera indica que hay luz en el final del túnel, hacia esa nueva normalidad, la realidad del Espanyol se empeña una vez más en llevar la contraria: lo que emprende este lunes el club perico es una escalada hacia el intento de recobrar su normalidad, la de seguir en Primera como los últimos 26 años. Y la de dejar atrás el coronavirus, tras ser el equipo de LaLiga más afectado, con ocho futbolistas y dos miembros del staff técnico contagiados.

A las nueve de la mañana comenzaban a llegar los primeros jugadores, comandados por el capitán, Javi López, a una Ciudad Deportiva Dani Jarque que recobra la actividad cuando se cumplen dos meses exactos del último entrenamiento que allí discurrió, el 11 de marzo, en circunstancias muy diferentes a las actuales. Forman los futbolistas tres grupos por la mañana y uno por la tarde.

Después de una semana corriendo en la calle con unas pautas muy marcadas, ahora, y durante al menos las dos próximas semanas, las sesiones son individuales, sin contacto físico alguno entre jugadores ni con el cuerpo técnico. En grupos de ocho que se reparten de dos en dos entre los dos campos de césped natural y los dos gimnasios. Y un ejercicio físico cuya máxima intensidad dura entre 35 y 50 minutos. Y así, hasta las cinco de la tarde.

Jonathan Calleri, llegando este lunes al césped con mascarilla, guantes y su propio material.
Ampliar
Jonathan Calleri, llegando este lunes al césped con mascarilla, guantes y su propio material.Carlos MiraRCDE

Antes, y más allá de las medidas higiénicas dispuestas por LaLiga (uso de mascarilla y guantes, del coche al césped y viceversa sin pasar por vestuarios ni por la ducha, control de temperatura al llegar…), los jugadores habrán tenido que someterse a un examen físico personal que determina el plan específico a seguir, especialmente con los futbolistas que han superado la COVID-19, como Wu Lei, Leandro Cabrera y Matías Vargas. Algunos, por ejemplo, se han sometido al test Course-Navette.

Raúl de Tomás, en el primer entrenamiento individual del Espanyol.
Ampliar
Raúl de Tomás, en el primer entrenamiento individual del Espanyol.Carlos MiraRCDE

El gran objetivo, además de optimizar la preparación para cuando se pueda entrenar en grupos (el lunes 25, según las estimaciones del Espanyol), es minimizar todo lo posible el riesgo de lesiones, elevado en todos los casos tras siete semanas de confinamiento y crítico si no se previene con los jugadores afectados por coronavirus.

Es una de las desventajas en la escalada que emprende el equipo de Abelardo Fernández. La otra, indudablemente, son los seis puntos que le distancian de la permanencia. Quedan muchos entrenamientos y 11 jornadas, si se completa todo el proceso, para llegar a la cima.