Vuelve el duelo Rosell-Laporta
Los dos expresidentes regresan a la primera línea mediática escenificando un conflicto que se mantenía latente desde hace diez años.
El conflicto latente en el Barcelona, que llevaba años viviéndose por personas interpuestas, ha saltado a primer plano con la aparición de Joan Laporta y de Sandro Rosell en los medios en un escenario que retrotrae inmediatamente al barcelonismo a hace diez años. En 2010 se escenificó el relevo de Joan Laporta (presidente desde el 2003) por Rosell que llegó hasta el 2014. A partir de entonces, el barcelonismo acentuó la trinchera y los dos históricos puntos de vista sobre la entidad ya no necesitan intermediarios.
Laporta apareció en Gol el viernes por la noche para confirmar que tiene bastante decidido concurrir a las próximas elecciones sin ahorrar críticas a la gestión de Bartomeu, al que considera un claro heredero del rosellismo. Por su parte, Rosell pasará hoy domingo al primer plano al romper su silencio y salir a escena en una entrevista a Mundo Deportivo cuando se cumple un año de su absolución tras pasar 643 días en prisión preventiva.
Laporta disparó con bala a la gestión de la junta: "el club tiene una situación muy precaria en estos momentos, se ha convertido en el club de los tres billones: un billón de ingresos, un billón de gastos y un billón de deudas. Tal como pinta, puede que no se llegue al billón de ingresos. Hay que presentar una propuesta creíble, factible y estoy reuniendo a personas y profesionales de mi confianza porque hay que pensar bien cómo revertir la situación económica del club".
"Si no hubiera sido presidente…"
Sandro Rosell volverá a escena hoy domingo en una entrevista que ha concedido a Mundo Deportivo. En un adelanto de la misma, el expresidente relaciona su papel al frente del Barcelona con su larguísima prisión preventiva y afirma que "si no hubiera sido presidente no hubiera ido a la cárcel. No tengo duda. Ni tampoco creo que nadie me hubiera investigado empresarialmente, ni espiado, ni hubiera tenido una persecución fiscal tan agresiva que aún sigo teniendo, 72 actuaciones de la Agencia Tributaria desde que salí elegido presidente. Antes de ser presidente, cero inspecciones fiscales. ¿Casual?".