La ciudad deportiva de Mos sufre un nuevo contratiempo
La Confederación Hidrográfica Miño-Sil, dependiente del Ministerio de Transición Ecológica emitió un informe desfavorable. Se tambalea el proyecto de Mouriño.
El gran proyecto de Carlos Mouriño para construir una imperial ciudad deportiva no acaba de ver la luz. Desde el anuncio oficial, se han sucedido las piedras en el camino, conformando una especie de maldición que están impidiendo el levantamiento de la obra ideada por el presidente celeste. El propio Mouriño aseguró en una primera comparecencia que estaba previsto que el primer equipo inaugurara las nuevas instalaciones en enero de 2019, pero más de un año después, el solar sigue sin coger forma.
Después de las trabas puestas por los comuneros de Tameiga y las dificultades para obtener la licencia para construir un centro comercial, el último revés llega por parte de la Confederación Hidrográfica Miño-Sil, dependiente del Ministerio de Transición Ecológica, después de que este organismo emitiese un informe desfavorable para la construcción de la ciudad deportiva celeste. En dicho informe se señala que “en el plan informado no existe ninguna reserva hidrológica declarada”. Este informe negativo es el tercero que recibe el club vigués, después de los emitidos por el Ministerio de Fomento y la Diputación de Pontevedra.
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Se da la casualidad de que este nuevo informe desfavorable para la construcción de la ciudad deportiva en Mos coincide en tiempo con el anuncio del Concello de Vigo para levantar otra ciudad deportiva en la urbe olívica, cerca de Balaídos. No obstante, la guerra entre Caballero y Mouriño y la ausencia de un centro comercial se antojan motivos suficientes para que el club celeste no acceda a utilizar esas instalaciones. Sea como fuere, lo cierto es que el gran proyecto de Mouiño se tambalea.