"Siento que tengo una deuda con el club y la afición y quiero pagarla"
André Pereira, que desde su llegada al Zaragoza sólo ha podido disputar seis minutos de Liga debido a sus problemas físicos, asegura que trabaja para "estar al 100%" cuando se reanude la competición.
André Pereira, que desde que llegó al Real Zaragoza en el pasado mercado invernal sólo ha podido disputar seis minutos de Liga debido a sus problemas físicos, está deseando que se reanude la competición para ofrecer su mejor versión: “Siento que tengo una deuda con el club y la afición y quiero pagarla. Son cosas que no se controlan, pero estoy trabajando mucho y realizo todos los ejercicios para estar al 100% cuando se pueda volver a jugar y poder darle alegrías a la afición, que es lo que más quiero. El sentimiento es de deuda y no quiero que se termine así”. Y añade: “Tengo la ilusión de que se vuelva a jugar, principalmente por la afición, para poder compartir los momentos con ellos. Sería muy bonito volver a jugar, ascender a Primera y festejarlo con ellos”.
El delantero portugués, a través de los canales de comunicación del Real Zaragoza, agradece al club el material facilitado para poder ejercitarse en casa, aunque no oculta su deseo de volver a trabajar junto a sus compañeros: “Hago dos entrenamientos al día. No es lo mismo, pero estamos intentando trabajar de la mejor manera posible. El club también nos ha dado algunos instrumentos de trabajo y hay muchas cosas para hacer y mejorar. Lo que echo de menos es el balón. Es nuestra vida y cuando nos quitan eso se hace muy difícil, pero todo saldrá bien y hay que hacer sacrificios para que volvamos a jugar y disfrutar de la vida”.
El futbolista cedido por el Oporto también explica cómo está viviendo el confinamiento para evitar que se propague el coronavirus: “Es una situación muy difícil para todos, pero hay que tener la cabeza fría y tener calma y paciencia porque las cosas van a mejorar. Todos debemos hacer el sacrificio de quedarnos en casa para después volver a disfrutar de la vida”. Y en ese sentido deja claro que la situación es mucho más complicada para todos aquellos que deben seguir trabajando, muchos de ellos en la primera línea de fuego: “Trabajar en esas condiciones sí es difícil y hay que estar agradecidos con ellos porque son muy importantes y están haciendo un trabajo muy difícil y hay que valorarlo”.
El hecho de estar encerrado en casa implica nuevas rutinas, tal y como relata André Pereira: “Intento despertarme sobre las 8:30 y las 9:00 horas, tomar el desayuno y entrenar. Después toca comer y también estoy aprovechando para mejorar mis cualidades culinarias. También juego al FIFA, veo series en Netflix, leo un poco y me comunico con la familia. Nos damos cuenta de las pequeñas cosas que nos hacen felices y la familia es algo muy importante en nuestras vidas. Intento hablar casi diariamente con ellos y también con mis amigos También miro las noticias de mi país casi diariamente para saber cómo están las cosas por allí. La verdad es que la preocupación es mucho menor y tienen menos casos que aquí. Portugal lo hizo bien, tomando medidas preventivas con tiempo”.