Unos 180 jugadores y técnicos tunecinos piden ser rescatados de Arabia Saudí
El portavoz de la federación de fútbol de Túnez eveló las "difíciles" condiciones económicas en las que se encuentran algunos.
Alrededor de 180 entrenadores y jugadores tunecinos residentes en Arabia Saudí exigieron a su gobierno que les repatríe de forma urgente, después de que el reino wahabí suspendiera hace dos semanas todas las competiciones deportivas debido a la crisis sanitaria causada por el COVID-19, informó hoy la Federación Tunecina de Fútbol (FTF).
En declaraciones a Efe, el portavoz de la FTF, Kaïes Reguez, explicó que "hasta ahora no se ha podido llevar a cabo ningún trámite ya que están vinculados por contrato a sus clubes y necesitan su autorización para abandonar el país".
Las autoridades tunecinas y la FTF buscan una solución "lo antes posible" para reunir al personal "dispersado" en una gran ciudad como Riad o Jeddah. La gran extensión del país y la prohibición de los desplazamientos interegionales dificultan la tarea, subrayó el responsable.
Reguez reveló, asimismo, las "difíciles" condiciones económicas en las que se encuentran algunos jugadores y técnicos cuyo permiso de residencia y contratos de trabajo expirarán próximamente.
El pasado 23 de marzo, el presidente de la Federación, Wadii Al Jari, envió una misiva al ministerio de Exteriores para pedir la evacuación de jugadores, entrenadores, médicos de equipo así como atletas de otras disciplinas y familiares que se encuentran bloqueados en el país del Golfo tras el cierre de las fronteras.
La FTF aseguró que los repatriados se comprometen a cumplir el autoaislamiento si el Gobierno moviliza un avión de la compañía nacional Tunisair para su regreso, como ya ha hecho con otros 7.600 nacionales (2.200 continúan en el extranjero a la espera de un vuelo).
A principios de marzo, el reino saudí decretó una serie de medidas preventivas para luchar contra la propagación de la epidemia, que hasta el momento ha causado oficialmente la muerte a 34 personas y contagiado otras 2.463.
Aunque las autoridades se mostraron reticentes en un principio a cancelar los eventos deportivos y optaron por celebrarlos a puerta cerrada, el pasado 14 de marzo anunciaron la suspensión indefinida de todas las actividades.
Una decisión que ha causado, según la prensa local, que la Federación Saudí de Fútbol se plantee la bajada de sueldos de los jugadores extranjeros para hacer frente a las pérdidas económicas.
El reino saudí, considerado uno de los principales depredadores de los derechos humanos en el mundo, trata de utilizar el deporte para mejorar su imagen y ha monopolizado algunos de los principales eventos deportivos a nivel internacional como el el Rally Dakar, la Supercopa de fútbol española o el tour ciclista "Saudí Tour". Un intento, aseguran las organizaciones de derechos humanos , por llevar a cabo un "blanqueo deportivo".