Verza: "El ERTE es lógico, es el momento de arrimar el hombro"
El centrocampista del Cartagena considera "normal" la medida en clubes de Segunda B y espera que perjudique lo menos posible a los implicados.
¿Cómo vive Verza esta situación de confinamiento?
En el tema personal, pasando el tiempo con la familia. Profesionalmente, es una sensación muy extraña ya que llevo la mitad de mi vida con una rutina fija, la de levantarme e ir a entrenador. El primer y el segundo día lo pasas, pero al tercero ya tienes el mono, el anhelo de ir a entrenar con los compañeros. A ver si todo esto acaba lo más pronto posible.
¿Se hace duro el trabajo en solitario?
Sí, claro. Si en verano ya cuesta, ahora mucho más. No es lo mismo trabajar con el grupo, con balón, que hacerlo sólo en casa. Yo tengo la suerte de que tengo espacio para salir y hacer un poco de cardio pero imagínate el que esté en un piso, es casi imposible. Estoy haciendo todo lo que nos mandó el cuerpo técnico y a veces me resulta poco, tengo miedo a no estar bien físicamente cuando sea el momento de retomar la actividad.
¿Costará coger el ritmo de nuevo?
No va a ser lo mismo, no es como en navidad que estás una semana parado y te hacen un plan de entrenamiento duro para recuperar el estado físico. Todo apunta a que el parón será más largo que en verano y considero que se notará mucho.
¿Cómo cree que puede quedar la competición?
No sé, lo único que tengo claro es que sería injusto que la temporada se diese por nula. Hay clubes que han gastado mucho dinero y no se les puede hacer esto. Debe haber un premio para el que quedó primero, el trabajo no puede caer en saco roto. También veo injusto que los que han entrado en descenso en la última jornada antes del parón tengan que descender. Hay que hilar muy fino, pero sea cual sea la decisión habrá perjudicados.
Al Cartagena no le vino bien el parón…
No, nos vino mal. Estábamos en un gran momento, tras dos grandes partidos ante Marbella y Córdoba, en una dinámica ascendente, mejorando en todos los aspectos. El equipo estaba asimilando todo el trabajo desde la llegada del nuevo entrenador (Borja Jiménez). Es una pena para nosotros en ese sentido.
¿Qué opinión tiene sobre el ERTE en el FC Cartagena?
Me lo esperaba, de verdad. Si esta situación no acababa pronto era algo normal. Se congela la entrada de dinero y tampoco hay para pagar. Es el momento de que todos arrimemos el hombro. Yo me veré muy afectado pero hay que pensar en que tenemos que salir adelante, que el club se vea lo menos perjudicado posible cuando volvamos a la normalidad.
¿Habló el club con los jugadores?
Paco Belmonte nos llamó a los capitanes. Nos comentó que en este momento no se podía sostener el presupuesto mensual sin los ingresos. El presidente nos dijo que tenía que hacerlo, que no le quedaba otra opción y que vería la forma de que afectara lo menos posible a los empleados y jugadores. Confiamos en que así va a ser porque hasta ahora ha cumplido todo lo que nos ha dicho. Ya digo, era un escenario normal y lógico en Segunda B.
Doce años después retornó a Segunda B, ¿la ve muy cambiada?
La categoría que yo recordaba era de muchísima calidad, presupuestos altos y en la que cualquier club te hacía una gran plantilla. Algunos jugadores preferían estar en Segunda B antes que en Segunda A. Desde hace un tiempo está mejorando, volviendo a lo que fue antes. Yo la mayor diferencia, por venir del fútbol profesional, la noto en los terrenos de juego, en los vestuarios de algunos estadios.
Tenías continuidad en Segunda División, ¿por qué apostaste por bajar de categoría?
Porque estaba cansado de las injusticias del fútbol. En las últimas temporadas me vi afectado por decisiones de terceras personas que me obligaron a bajar de categoría. En el Levante estuve con Muñiz y logramos el ascenso a Primera pero él tenía a sus jugadores de confianza. Así que regresé al Almería, donde había vivido buenos años pero no fue una decisión acertada volver a Segunda ya que me costó mucho estar en la máxima competición. Además, no fue un buen año para el equipo y yo problemas físicos durante todo el curso. Retorné al Levante pero con el mensaje del club de que debía buscarme un destino. Paco López era el entrenador y le pedí que me dé al menos la oportunidad de mostrarme durante tres o cuatro partidos en pretemporada y que luego decida. Los juego y me dice que ha dado órdenes al club para que no fiche a nadie para mi demarcación, que estaba encantado conmigo. Pero los dirigentes tenían otro tipo de intereses y el último día de mercado me fuerzan a salir bajo demanda de despido improcedente. No quería más líos, así que decido irme. Tuve varias ofertas de Segunda División pero por el Fair-play financiero sólo pude irme al Rayo Majadahonda. Al acabar el curso de nuevo contaba con propuestas para seguir en Segunda pero quería estar cerca de casa, buscaba tranquilidad y el proyecto de Belmonte y Breis me convenció.
Jugó en el Rayo Majadahonda, que le quitó el ascenso al FC Cartagena en el último segundo…
Sí, fue un gran año para mí a pesar del descenso. Deportivamente, de los mejores. Me divertí como un loco. Quitando al Granada, bailamos a todos los rivales. Pero estuvimos dos meses sin ganar un partido y descendimos. Sobre ese partido contra el FC Cartagena se hablaba mucho. Iriondo, un entrenador que enriquece a quien está a su lado, decía que sabía que durara lo que durara el choque el Majadahonda iba a subir. Sabía que en ese saque de banda estaba el ascenso, por eso estaba tranquilo. Ese domingo yo jugaba por la tarde con el Almería y estaba concentrado, vi el partido por televisión y quería el ascenso del FC Cartagena ya que es un club que está cerca de mi casa (Orihuela) y podía tener opciones de firmar. Pero llegó el gol y le pegué patadas a todo… y el último día de mercado firmo allí.
¿Cómo va su etapa de albinegro?
Pues la primera mitad del curso muy bien, pero este 2020… Entre esto y los problemas físicos no está siendo bueno. Pero estoy en un club que quiere subir y en el que todos sabemos cuál es el objetivo desde el inicio. Vine pensando en que cada quince días tendría un escenario de Segunda División y así está siendo, la afición responde cuando jugamos en casa. Estoy convencido de que este será el año del FC Cartagena, vamos a lograr el ascenso.
¿Le ha sorprendido algún jugador de la plantilla?
Todos los futbolistas tienen un nivel equilibrado peo está claro que hay mucha gente joven que tiene mucho potencial, nivel de Segunda División y si mejoran en ciertos aspectos que te da la experiencia llegarán a Primera. Es el caso de Carrasquilla, De Vega, William y otros…
¿Cuál será la clave para mantener el liderato?
El vestuario, lo tengo claro. Siempre que he conseguido algo grande había un vestuario sano. El que se quedaba fuera de la convocatoria o del once no era mala gente, no iba a fastidiar al grupo. Una manzana podrida de te puede romper un año, un objetivo. Y aquí no hay ninguna, el grupo está muy unido.
¿Será determinante quedar primero?
Yo espero acabar primero, tengo pánico a jugar tres eliminatorias porque un mal día o diez minutos malos te pasan factura y tiran por tierra el trabajo de todo un campeonato. No quiero ni pensar en no acabar primero. El mensaje que tenemos de puertas hacia adentro es ser líderes y para ello es importante, una vez clasificados para el playoff, no relajarse.