Iñigo Martínez: "La Eurocopa era una opción clara, pero es lógico retrasarla"
"La Copa ha sido una locura para el Athletic, con momentos que cualquier otro equipo no hubiera sido capaz de darle la vuelta", lanza el central internacional del Athletic.
Iñigo Martínez era un fijo en la lista de elegidos de Luis Enrique con España para defender en Bilbao la Eurocopa este verano. Sin embargo, por razones obvias, se ha retrasado para junio de 2021: "Era una opción clara, pero es una decisión consecuente retrasarla y lógica. Una pena por lo que supone una Eurocopa, aunque prima la salud", señala el central del Athletic, que no oculta que "veía serias opciones, pero intentaremos estar el año que viene, que es una de las cosas que cualquier futbolista desearía".
El rendimiento de Martínez esta Liga por su perfil izquierdo de la defensa rojiblanca ha resultado brutal: "Creo que está siendo el más regular tanto en lesiones como en los partidos, de momento me encuentro bien, veremos cómo viene este paroncito. Esperemos llegar fuertes y descansado para la Liga". Aunque quizás faltaba algo de gasolina al equipo para el tramo final: "No hay mal que por bien no venga, llegaremos con más fuerzas que las que teníamos; a ver si seguimos igual de bien y tiramos para arriba en Liga", señala desde su confinamiento en el Ensanche bilbaíno. Lo lleva como puede, a veces hasta con resignación: "Se hace un poco extraño para nosotros que estamos acostumbrados a ir a Lezama, tocar balón con los compis y ahora te lo quitan, que es como quitarle a un niño un juguete de las manos", ejemplifica.
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Ahora debe tirar de ingenio y emplear herramientas caseras para tratar de contrarrestar este viraje abrupto: "Sacar cosas como botellas de agua para hacer ejercicios se hace extraño. Tenemos el trabajo que nos ha puesto el club, es lo que nos toca en estos momentos". Un plan establecido e individualizado que cada jugar debe actuar con ejercicios de fuerza y físicos, para después informar al club sobre sus avances. Y, paralelamente, una dietista que les ha mandado "lo que debíamos de comer y lo que no. Somos profesionales y hay que comer sano y moverte, que estando parado pierdes tono", describe el central internacional. "Me tiraría al armario, pero estoy acostumbrado a controlarme", lanza con humor en los micrófonos de Radio Nervión.
La final de Copa queda en suspenso. Sus pilares resultan evidentes: "Ni queremos, ni esperamos que sea sin público. Nos merecemos tanto nosotros como la afición que disfrutemos de este partido y jugarlo sin afición no sería igual, sería un pelín chapuza". Un derbi vasco ante la Real en La Cartuja, con Martínez como protagonista indispensable y morboso: "Es lo que quería en todo momento y me alegré. Tengo compañeros allí que se lo merecen y que llevan años intentando estar en una situación así". El que pierda deberá purgar la penitencia: "No será nada fácil por la rivalidad que hay, pero de peores también hemos salido. Por nuestra cabeza no cabe perder", sentencia. Todo se resetea y el favorito es más incierto ahora, con la imperial Real en talleres: "Vamos a estar tiempo parados y habrá que hacer una minipretemporada, queda Liga y se decidirá la fecha de Copa", remarcó.
Una final de Copa trazada a trancas y barrancas por los leones hasta alcanzar la meta regateando prorrogas y lanzamientos de penalti: "Ha sido una locura para el Athletic, con momentos que cualquier otro equipo no hubiera sido capaz de darle la vuelta a los problemas que tuvimos; ha sido una gozada, al final estamos donde queríamos estar y ahora falta rematar", desliza Iñigo, que sentencia con un rotundo: "Las finales hay que ganarlas". Se le resiste el gol, y mira que lo ha intentado con profusión. Se ha topado con postes, largueros y pies de los porteros: "Llevo buscando el gol desde que vine al Athletic, seguiremos insistiendo, pero no le doy muchas vueltas. Mi labor es defender bien, por eso me pagan y a eso me dedico", relata el central ondarrutarra.