El Málaga mantiene el estado de optimismo
El vestuario no pierde la confianza pese a la derrota sufrida ante el Zaragoza. Buenacasa: “El equipo está fuerte. Anímicamente vamos a más y podemos competir con cualquiera”.
La derrota ante el Zaragoza no ha menguado el ambiente de confianza y optimismo reinante en el vestuario del Málaga. El equipo de Sergio Pellicer dio la cara y durante muchas fases del encuentro se mostró superior al cuadro maño, firme candidato al ascenso directo y que ya se encuentra a un solo punto del líder, el Cádiz. “Este es el camino a seguir”, repitieron tanto el técnico como Luis Hernández después del encuentro. Y en la misma línea se expresó Sergio Buenacasa: “El equipo está fuerte. Anímicamente vamos a más y competimos de tú a tú con cualquiera”. El mensaje se repite también dentro del vestuario, donde existe la convicción de que el equipo mantendrá este nivel de juego hasta el final del campeonato.
A pesar del 0-1, el Málaga mantiene el estado de optimismo imperante en La Rosaleda desde hace semanas. La llegada de Pellicer revitalizó al equipo y la calma institucional aportada por la entrada del administrador judicial y la salida de los Al Thani han creado una corriente muy positiva.
Sin confianza. El Málaga vive su mejor momento de la temporada, pero los equipos de abajo están sumando puntos y la renta sobre el descenso ha bajado este fin de semana hasta los tres puntos. Con 11 jornadas aún por delante, el objetivo es alcanzar los 50 puntos cuanto antes para tener un cómodo final de curso.
Le quedan seis partidos en casa y cinco fuera
El Málaga jugará seis de los once partidos que le quedan en La Rosaleda. Los blanquiazules deben cimentar su pemanencia en el estadio de Martiricos. Por la Costa del Sol aún deben desfilar Huesca (este sábado, a las 16:00), Extremadura, Girona, Albacete, Deportivo y Alcorcón. Salvo los madrileños, que se encuentran a cinco puntos del playoff y seis por encima del descenso, el resto de rivales que deben visitar La Rosaleda están metidos de lleno en las peleas por subir a Primera (Huesca y Girona) o por evitar el descenso a Segunda División B (Extremadura, Albacete y Deportivo).
A domicilio, los de Sergio Pellicer deben medirse a Tenerife, Lugo, Rayo Vallecano, Sporting de Gijón y Almería. Será en el estadio de los Juegos Mediterráneos donde cerrará la temporada el Málaga. Para entonces espera no tener urgencias clasificatoria y tener garantizada su continuidad en Segunda.