El 1x1 del Valencia: Gameiro se reencuentra con el gol y Guedes consigo mismo
El francés vio puerta casi tres meses después, Guedes revolucionó el partido para llevarse la ovación de la grada y Parejo volvió a mostrar su sangre fría con el balón.
Cillessen: Inseguro lejos de los palos. Salió a destiempo en tres ocasiones que, por suerte, sus propios centrales despejaron y no remataron los delanteros rivales. Llevaba casi tres meses sin jugar y lo notó, sin embargo, bajo los palos intervino a dos disparos lejanos atajando ambos con solvencia.
Gayà: De lo mejor de su equipo. Un día más el de Pedreguer volvió a exhibir un buen rendimiento atrás, combinado con ser uno de los mayores recursos de su equipo para atacar. Mandó un balón al larguero tras un centro-chut peligroso en el 16 y Joel le privó del gol al atajarle un disparo desde fuera del área.
Paulista: El brasileño llegaba justo al partido y no fue su mejor día. Pese a que el nivel defensivo de toda la zaga trasera es mejor cuando él está sobre el campo, Loren le hizo caer en la trampa en el gol del empate. Gabriel saltó, Loren no, y el bético remató a placer.
Diakhaby: Es más central cuando tiene a una referencia a su lado. Mantuvo la concentración durante los 90 minutos, algo que le había costado las últimas semanas. Estuvo solvente al cruce y evitó los remates por alto de los sevillanos. Se reivindica tras varias semanas malas.
Wass: Desacertado en defensa. El danés cometió varios errores a lo largo del partido, primero dejó botar un balón que Canales le arrebató y cerca de estuvo de permitirle quedarse mano a mano con Cillessen. Posteriormente, agarró en el área sobre Borja Iglesias cuando este le había ganado la marca en un corner. No obstante, en ataque asistió a Parejo en el gol de forma magistral dentro del área.
Kondogbia: Confirma su recuperación. Geoffrey jugó prácticamente todo el partido con amarilla pero apenas lo acusó. Su aportación en ataque volvió a ser clave, especialmente con los desplazamientos diagonales en largo, en los cuales el equipo se oxigenó cuando el Betis apretaba.
Parejo: Dejó su sello en un partido en el que tuvo que volver a escuchar algunos pitos. El capitán se atrevió a liderar a su equipo cuando peor lo pasaba y tras el descanso pudo desempeñar mejor sus tareas gracias a los retoques de Celades. Con la misma frialdad con la que habitúa a sacar el balón desde su área, remató para marcar, pero en este caso desde el área rival.
Ferran: Cumplió con buena nota. El de foios no pudo sumar estadísticas el día de su cumpleaños, pero sí que dejó un abanico de buenas sensaciones un día más. Sus centros rasos que en otras ocasiones han acabado en gol no encontraron rematador hoy. Se marchó antes de acabar el partido con molestias en la pierna.
Soler: Trabajador. Estuvo más a gusto tras los segundo 45 minutos donde tuvo más peso en el juego en el centro del campo. Cerca estuvo de anotar de nuevo tras recibir un centro lateral, pero no estuvo acertado cara a puerta. Volvió a ser el futbolista que más corrió del equipo, por delante de Parejo, con 11.9 kilómetros.
Gameiro: Coge oxígeno. El francés lo estuvo intentando durante todo el encuentro, pero daba la sensación de que llegaba una décima tarde a todas las ocasiones. Sin embargo, dejó atrás a los fantasmas al reencontrarse con el gol casi tres meses después. El punta anotó un derechazo medido desde fuera del área que tocó en el palo.
Maxi: Incómodo. El charrúa no gozó de buenas oportunidades en los 45 minutos que pudo disputar antes de marcharse con molestias al descanso. Aunque filtró un buen balón entre líneas a Gameiro, le faltó entendimiento con el francés. En la salida de balón en largo aportó soluciones y sacó de quicio a los centrales béticos.
Guedes: Se reencontró consigo mismo. Su entrada al campo le sentó tan bien al equipo como el cambio de sistema de Celades, del 4-4-2 al 4-1-4-1. El portugués aportó chispa al ataque desde el primer momento, de hecho, suya fue la asistencia a Gameiro desde la izquierda. Con el Betis volcado en el empate gozó de espacios que le permitieron, muchos meses después, ganarse la ovación del estadio, ya fuera con remates atajados por Joel, regates o cabalgadas. Acabó jugando de delantero.
Cheryshev: Siempre aporta. El ruso tuvo una actitud ejemplar que acompañó al buen nivel que mostró. Cerca estuvo de marcar en un pase de la muerte, pero su remate se marchó fuera y también con un disparo cruzado, con el mismo resultado.
Sobrino: Entró en el descuento.