El City hipervitaminado
Guardiola ha gastado 776 millones en fichajes para ganar siete títulos. Le han traído siete laterales. Los rivales, como Klopp, se quejan: “Compran lo que quieren, es Fantasía Land”.
EI dinero no lo es todo en el mundo del fútbol, pero si llega en cantidades torrenciales, ayuda. Le ha pasado al Manchester City. En 1999 estaba penando en la Tercera inglesa y ahora es el rey del gasto en fichajes de toda Europa. Desde que Guardiola llegó en 2016, la entidad ha tirado de chequera con 776,3M€ en 28 fichajes (frente a los 249,7 en ventas) para levantar siete títulos (dos Premier, una FA Cup, dos Copas de la Liga y una Community Shield). No salieron baratos, a 75 millones de euros el trofeo...
Un City moldeado a los caros gustos de Pep que ya venía cubierto en oro negro en un proceso de vivir a la sombra del United a ser nuevo rico como detalla, en su libro ‘Richer than God’ (‘Más ricos que Dios’), el periodista británico e hincha citizen David Conn. Del viejo Maine Road a gastarse 230M€ en una ultramoderna Academia para la cantera, bajo el palio del jeque Mansour bin Zayed Al Nahyan.
El City había pasado de manos del excéntrico político tailandés Taksim Shinawatra, que fichó a Kompany pero se perdió su presentación porque se dio a la fuga por evasión fiscal, a las del dueño de una de las mayores fortunas del planeta, cuya savia es el petróleo. Le dio la vuelta al club como si fuera un calcetín. “Cuando llegó el Sheikh Mansour la organización del City era casi amateur y las oficinas no tenían ni ventanas”, relata Conn en su libro.
Un 'overbooking' de laterales...
Así, este City hipervitaminado y bajo el mando del CEO Ferran Soriano se ha permitido el lujo de concederle a Guardiola siete laterales. Sólo entre Cancelo, Mendy, Kyle Walker y Danilo ha desembolsado 205 millones... Un flujo de fichajes bautizados por Jürgen Klopp con su habitual sorna: “Es Fantasía Land; si quieren un jugador, lo compran”. Quejas que contaron con la respuesta, ácida, del propio Pep.
Por eso, la sanción de la UEFA de dos años sin jugar en Europa por violar el Fair Play Financiero es un torpedo más a la ambición deportiva del City de ganar al fin la Champions que a su economía, garantizada desde Abu Dhabi. Pase lo que pase.