1x1 del Almería: acabó jugándose las habichuelas sin la doble Ñ
El Almería vuelve a claudicar en casa, donde ha dejado escapar diez de los últimos quince puntos. No dispone de ninguna ocasión clara.
Cada vez parece más difícil el ascenso para el Almería. No se ha descolgado aún en la clasificación, pero no desprende buenas sensaciones y continúa dejándose puntos en el Estadio de los Juegos Mediterráneos, que sólo ha visto ver ganar a su equipo en uno de los últimos cinco partidos. José María Gutiérrez introdujo cuatro novedades para el duelo ante el Fuenlabrada, caso de Fernando, Jonathan, Aguza y Villalba. Defendió mejor que en partidos anteriores, pero apenas asustó a Biel Rivas, acabando con la doble Ñ en el banquillo.
Fernando. El murciano regresó al once tras su suplencia en Huesca, donde actuó Sivera. A pesar de jugar los noventa minutos, se antoja complicado evaluar a Fernando, siendo lo más justo un 'sin calificar', ya que el Fuenlabrada apenas le inquietó, mostrándose seguro el arquero cuando el cuadro visitante se acercó a su área.
Romera. En la primera parte el Almería creó más peligro por su banda, aunque el hoy capitán rojiblanco no se incorporó al ataque en demasía, prefiriendo guardar la ropa por si hubiese contra local. En este sentido, el lateral diestro se mostró seguro atrás, robando un par de balones peligrosos.
Maras. Sin mucho trabajo en defensa, le costó romper la primera línea de presión el Fuenlabrada, abusando del pase horizontal y seguro a Costas. En el plano defensivo no tuvo gran trabajo, pero aprobó en lo que hizo sin balón.
Costas. Más de lo mismo que Maras. Se echó de menos que condujese y dividiese para crear superioridad en el centro del campo ante un cuadro madrileño muy bien posicionado en el tapete del Estadio de los Juegos Mediterráneos. Mejoró en defensa, sin ese fallo por partido al que venía acostumbrado.
Jonathan. El brasileño regresó a la titularidad por la sanción de Iván Martos y fue de los que más lo intentó, sobre todo en la segunda mitad, percutiendo por la banda izquierda. A la hora de juego desaprovechó una situación clara para ponérsela a Juan Carlos Lazo, situado en muy buena posición para batir a Biel Ribas.
Corpas. El ex del Marbella fue de lo más destacado del conjunto almeriense, desbordando más de lo habitual, sobre todo, al inicio del segundo acto. En ese momento del partido puso un buen pase a Juan Muñoz, que este no aprovechó. A la hora de juego dispuso de otra asistencia al sevillano, quien mandó el balón dentro de las mallas, siendo el tanto anulando por fuera de juego.
Kaptoum. El futbolista propiedad del Betis aterrizó el pasado mes y ya se ha ganado un hueco en el centro del campo, aunque no mejora lo que había. En el segundo acto quiso el balón, interpretando bien el guion del partido y conduciendo para romper líneas. Eso sí, tenía que tener cuidado de no dejar descuidada su posición al jugar la UDA sin centrocampista defensivo. Finalmente, se colocó como mediocentro posicional.
Aguza. El catalán fue otra de las novedades en la alineación de Gutiérrez, sin ser ese futbolista destacado de principio de Pedro Emanuel, con quien tuvo mucho protagonismo en una sala de máquinas formada por él y De la Hoz. Pasó por el encuentro sin pena ni gloria.
Villaba. No tuvo el protagonismo del último partido, el que le llevó a sentar hoy a Lazo, por primera vez en el banquillo desde que llegó José María Gutiérrez al banquillo del Mediterráneo. Empezó partiendo desde el costado zurdo, aunque su tendencia era ir hacia el centro, situándose por detrás de la doble Ñ, dejándole el carril exterior para Jonathan Silva. A pesar de tener la calidad para ello, no llegó a filtrar ese pase para dejar a Juan Muñoz y Darwin Núñez delante de la portería de Biel Rivas.
Juan Muñoz. El sevillano fue quien más se acercó al 1-1 sin hacerlo. En el 49' tuvo una ocasión clarísima dentro del área de penalti tras pase de Corpas. Fue el propio extremo jiennense el que once minutos después le asistió para que anotase con la rodilla, siendo anulado por estar en un claro fuera de juego. Se le fue el control tras un contragolpe clarísimo en el que el Almería iba en clara superioridad numérica.
Darwin Núñez. El charrúa lleva estancando demasiadas semanas, hasta el punto de ser sustituido en el minuto 80, cuando era el único delantero local que había en el terreno de juego y cundo el Almería buscaba un gol que necesitaba sí o sí. Apenas gozó de ninguna ocasión clarísima ni mostró esas cabalgadas y potencia que tanto le caracterizan. Fue sustituido cuando su equipo necesitaba el gol más que nunca
Lazo. Sus últimas actuaciones provocaron que se quedase en el banquillo por primera vez desde que Gutiérrez dirige al Almería. Aun así, fue la primera entrada, saltando al verde por Villalba. Condujo un contraataque peligroso tras un saque de esquina rival, contragolpe desaprovechado por Juan Muñoz. Bajaba a recibir e intentaba aparecer pidiendo el balón, aunque continúa lejos de su mejor nivel.
Vada. Entró por Juan Muñoz a falta de veinte minutos para ganar otro efectivo en la medular, dejando a Kaptoum como mediocentro posicional y colocándose él como interior izquierdo y Aguza, derecho. El argentino botó un libre directo que se marchó demasiado desviado en los últimos compases del partido, cuando también filtró un buen balón para Lazo.
Barbero. El almeriense volvió a tener sus minutos por segunda vez en la temporada. Entró por Juan Muñoz, siendo la única referencia en ataque, quizás demasiada responsabilidad para el joven cedido por el Osasuna. Fue bien a la presión, aunque no tuvo ninguna oportunidad para ser profeta en su tierra.