El Atlético se crece ante su público en las grandes noches
El equipo rojiblanco nunca ha perdido en rondas eliminatorias de Champions jugando como local desde que llegó Simeone. Ni Barça, Bayern, Juventus, Madrid...
El Atlético tiene ante sí el toro más bravo del fútbol actual. Un Liverpool que se encamina al título de la Premier League con más de 20 puntos de ventaja sobre el Manchester City, segundo clasificado, y que es el actual campeón del mundo y vigente vencedor de la Champions. Mientras el equipo rojiblanco pasa por el peor momento deportivo desde la llegada de Simeone, enfrentarse a un rival de tal magnitud hace que la misiva de eliminar a los reds en octavos de la máxima competición europea parezca misión imposible.
Sin embargo, con el Atlético jugando ante su afición no hay imposibles. Desde la llegada del Cholo al club en diciembre de 2011, el Atlético nunca ha caído como local en una ronda eliminatoria de la Champions y contando también la fase de grupos tan sólo el Benfica en 2015 y el Chelsea en 2017, primer partido del Wanda Metropolitano en la competición, han sido capaces de sumar un triunfo en feudo colchonero. Barcelona, Juventus, Bayern y Real Madrid han visitado dos veces cada uno la casa del Atlético en Champions sin que ninguno haya salido victorioso, aunque en el caso del equipo blanco la derrota por 2-1 de 2017 le sirvió para avanzar de ronda tras el 3-0 de la ida.
Juventus y Dortmund
El Atlético sabe que gran parte de sus opciones en la eliminatoria pasan por obtener un buen resultado jugando en el Wanda Metropolitano para saltar a Anfield con ventaja. Un plan que salió a la perfección la temporada pasada contra la Juventus, donde Godín y Giménez dieron un espectacular triunfo por 2-0 ante los italianos, pero que posteriormente se truncó con el 3-0 de la vuelta en Turín. Ese mismo año había sucumbido el Dortmund por 2-0 en su primera visita al Wanda Metropolitano. Desde el primer partido como local en Champions con Simeone en el banquillo, con victoria ante el Zenit por 3-1, la fortaleza colchonera primero en el Vicente Calderón y posteriormente en el Wanda Metropolitano ha hecho del Atleti uno de los equipos del mundo más temibles como local.
Milán, Barcelona y Chelsea
En la temporada 2013-14 el Milán sufrió en octavos el poderío colchonero en un año donde se acabó alcanzando la final. Si el Atlético ya había ganado 0-1 en la ida con un gol de Diego Costa, en la vuelta dio un golpe sobre la mesa goleando por 4-1 al conjunto rossonero con un doblete de Costa y los tantos de Arda Turan y Raúl García. En los cuartos la misión era más complicada, con un 1-1 de la ida ante el Barça y sin Diego Costa por lesión. Pero el Atlético salió a comerse a los blaugranas y Koke dio un triunfo inolvidable para la parroquia rojiblanca, que llenó el Calderón y vibró con un ambiente espectacular. En las semifinales llegó el Chelsea de Mourinho, que formó un once ultradefensivo en busca de un empate sin goles que acabó consiguiendo. Pero el técnico portugués no esperaba el 1-3 de la vuelta, pese al gol de Torres para los blues, con la gran novedad de Adrián en el once consiguiendo el gol del empate. Diego Costa y Arda cerrarían el pase atlético a la final.
Visita del Madrid
Un año después la Juventus visitaría el Vicente Calderón en fase de grupos, donde el Atlético se impuso por 1-0 con un gol de Arda Turan que fue capital para acabar en la primera plaza de grupo. Ese liderato llevaría al equipo rojiblanco a medirse en octavos al Bayer Leverkusen. El Atlético cayó en Alemania con un gol de Calhanoglu, tanto que igualó Mario Suárez en el feudo colchonero. La eliminatoria tuvo que acudir a los penaltis, donde los rojiblancos se impusieron ante su afición por 3-2. En los cuartos llegaría el Real Madrid en un partido de ida donde los blancos no pudieron superar a un gran Oblak para el 0-0 final. En la vuelta un gol de Chicharito daría el pase a semifinales a los blancos.
Barcelona y Bayern
Para la temporada 2015-16 el Atlético resolvería los octavos de final en el Vicente Calderón recurriendo de nuevo a los penaltis tras 210 minutos contra el PSV sin goles. En aquella tanda el equipo rojiblanco se impuso por 8-7. En estos cuartos el Barcelona se presentaba en esta ocasión con un 2-1 en la ida y con Torres expulsado, pero el Atlético le daría la vuelta al marcador con un doblete de Griezmann en otra noche histórica del Vicente Calderón. En las semifinales sería el todopoderoso Bayern de Guardiola el que intentaría tirar abajo la fortaleza del Atlético. Pero a la resistencia colchonera se le unió un toque de magia por parte de Saúl, que dejó el triunfo por 1-0 en una jugada maradoniana marchándose de todo rival que le salió al paso.
Bayern, Leicester, Real Madrid
El equipo bábaro volvería a sufrir el poderío atlético como local una temporada después, aunque esta ocasión en fase de grupos. Yannick Carrasco fue el encargado de dar la puntilla al Bayern con un zurdazo que se coló en la meta de Neuer tras tocar en el palo. Un triunfo que serviría al Atlético para volver a avanzar a octavos como primero de grupo. Ahí se volverían a encontrar con el Leverkusen, aunque el pase estaba totalmente encaminado tras el 2-4 de la ida. El partido de vuelta (0-0) será recordado por la triple parada espectacular de Oblak. En cuartos el Atlético derrotó al Leicester, reciente campeón de la Premier, por 1-0 en el Vicente Calderón para viajar a Inglaterra con una ventaja que haría válida con el 1-1. En las semifinales el 3-0 del Bernabéu era una losa enorme, aunque el Atlético llegó a situarse con un 2-0 que reabrió las esperanzas de remontada para la parroquia colchonera. El encuentro acabó bajo una intensa lluvia con una comunión absoluta entre la afición y los jugadores.
Un poderío en casa que vivirá una prueba de fuego con la visita del Liverpool, un club que no consiguió ganar en el Vicente Calderón ni en Champions ni en Europa League durante la primera década del Siglo XXI a pesar de partir siempre como favorito. El Atlético se acoge a su afición para intentar lograr una noche mágica e inolvidable y comenzar a llenar de recuerdos el Wanda Metropolitano, un estadio que todavía se encuentra en sus inicios.