Nolito frente a Balaídos
Las entradas se agotaron en dos horas y la afición jugará su papel en el partido de esta tarde. Se miden dos víctimas del Mirandés en la Copa del Rey.
Nolito será protagonista hoy por doble motivo: Primero, porque puede ser la primera víctima del recién llegado Suso y segundo, porque Balaídos fue su jardín particular durante tres temporadas, probablemente los mejores años de su carrera futbolística. Este verano estuvo a punto de regresar a su querido Vigo, donde los mariscadores eran sus amigos íntimos y la lluvia sonaba a flamenco. Estaba todo acordado con el Celta, pero la racanería del director general olívico, Antonio Chaves, truncó la ilusionante operación.
Hoy recibirá la ovación que se merece, bien desde el banquillo o desde el césped, pero a la vez será una importante amenaza ante un Celta que se juega la vida (sigue el partido en directo en As.com). Hace varias jornadas que los célticos afrontan una final cada semana y cada cual es más agónica. El público está entregado, por eso las entradas se agotaron en apenas dos horas tras el ridículo informático. Después de dos días con la web inhábil, el club decidió regalar dos billetes por socio y éstos volaron.
Sin Copa. Tanto Celta como Sevilla quedaron eliminados de la Copa en el mismo escenario, Anduva. Los vigueses llevan una ronda más de descanso, por lo que el foco está totalmente centrado en salir cuanto antes del descenso. Óscar no tiene lesionados por primera vez, aunque Kevin será baja por sanción. En su lugar jugará el cuestionado Mallo. El técnico catalán admitió que los últimos en llegar, Bradaric y Smolov, aún no están para jugar noventa minutos.
Lopetegui, por su parte, recupera a Diego Carlos y medita dar la alternativa a Suso en el once. Los hispalenses desean ganar para mantenerse en puestos de Champions y disipar las dudas después de perder en Miranda de Ebro y empatar en el Sánchez Pizjuán, contra el Alavés.