"Ha sido un mercado duro, los jugadores no querían venir"
Txema Indias, director deportivo del Leganés, pone de manifiesto durante las presentaciones de Assalé y Amadou las dificultades que han tenido los pepineros en el mercado invernal.
El Leganés ha presentado esta mañana a dos de sus cuatro refuerzos durante el mercado invernal. Rogger Assalé (delantero, 26 años, procedente del Young Boys suizo) y Ibrahim Amadou (medio centro, 26 años, procedente del Sevilla) han tenido una puesta de largo comedida, con mensajes de optimismo pese a la compleja situación que atraviesan los pepineros, aún en descenso con los mismos puntos que el Mallorca. Panorama complejo que ha dificultado fichar nuevos futbolistas.
“Hemos estado en un mercado muy complicado para nosotros porque es difícil que los jugadores quieran venir cuando estás penúltimo, independientemente de que estemos en una de las mejores ligas del mundo”, insistió durante el acto Txema Indias, director deportivo del Leganés y cicerone tanto de Assalé como de Amadou.
También quiso Indias defender la gestión de un Leganés que ha visto como perdía a Youssef En Nesyri, fichado casi por sorpresa desde el Sevilla. “Respeto todos los comentarios, pero no puedes firmar a los que puedas, sino a los que quieran venir”, insistió. “El Leganés es un ejemplo de gestión a lo largo de estos años. No olvidemos que viene de Segunda B y que atravesó una situación complicada. Gracias a esta familia tuvo viabilidad”, continuó.
Comunión para salvar la categoría
Precisamente que Assalé y Amadou hayan querido enrolarse en el proyecto de Leganés pese tan oscuro panorama ha sido uno de los ejes sobre los que Indias ha agradecido a uno y otro sus fichajes como pepineros. “[Assalé] viene de jugar Champions y Europa League. Que venga a ayudarnos en este momento es para tener palabras de agradecimiento”, abrió fuego el director deportivo de Leganés. “[Amadou] no se lo pensó (…) Tiene dentro del vestuario compañeros que me imagino que le habrán hablado bien del Leganés. Creemos que nos puede ayudar y mucho” prosiguió.
Indias, poco dado a los mensajes de cara a la galería, cometió en este caso una excepción para rogar a la parroquia blanquiazul la comunión que tuvo con su equipo ayer en el triunfo ante la Real Sociedad. “Fue un día muy complicado. No pintaba del todo bien. Si no es por nuestra afición, por esa comunión, no hubiéramos sacado el partido. Está claro que, si existe esa comunión entre la afición y el equipo, tendremos todos más fácil salir”, añadió seguro.
Un nuevo reto y otro recurrente
Fue precisamente el ambiente que vivió Butarque durante la remontada ante la Real una de las cosas que más ha impresionado en su poco tiempo como pepineros tanto a Assalé, como a Amadou. “Es un público muy fanático. En España el fútbol es una cultura, casi una religión”, dijo el primero en francés y traducido por Sergio Hontoria, uno de los fisios del Lega.
“Yo no conozco muy bien el club, pero aquí hay dos o tres excompañeros del Sevilla y me ayudó a elegir”, confesó (éste sí en Español) Amadou. El medio centro también desveló que vivió nervioso el cierre de un mercado en el que su fichaje se ató casi sobre la medianoche. “Estaba pendiente de tres clubes. Fue difícil, pero quería volver a España”, dijo a propósito del pacto a tres bandas entre Leganés, Sevilla y Norwich.
Assalé jamás ha jugado en LaLiga, pero se toma esta posibilidad como un reto pese a que ya ha competido en Champions o Europa League. De ahí su apuesta pese a que las negociaciones, dice, no fueron sencillas. “No ha sido nada fácil, las negociaciones incluso han sido complicadas. Pero lo más importante es que he llegado aquí. (…) La española es una de las ligas más importantes del mundo. Me va a ayudar a mejorar mi rendimiento”, zanjó Assalé (dorsal 20) antes de salir, junto a Amadou (dorsal 23), al césped de la Instalación Deportiva Butarque donde, jaleado por una docena de aficionados, se han puesto por primera vez la camiseta blanquiazul.