Courtois, la otra cara del éxito
Aprovechando el mejor comportamiento defensivo del equipo, ha recuperado desde hace tiempo su mejor nivel. Se habla menos de él, pero ya es vital.
Mallorca fue hoyo y trampolín para Courtois. Tras son Moix le llovieron las críticas, pero también desde aquella noche empezó a escampar para él. La culpa la tuvo un único tiro a puerta, de Lago Junior, que fue suficiente para alejar de la victoria a un Madrid al que se le achacó un exceso de vulnerabilidad. Ese mazazo, sin embargo, acabó reforzando al equipo, que consiguió blindarse con Courtois como principal responsable.
El belga ha sellado la portería, con ocho partidos solventados con sólo tres goles en contra y seis porterías a cero, la última el sábado ante el Espanyol. Frente a los de Machín, como viene siendo costumbre, intervino poco pero decisivamente. Con 0-0 le sacó un cabezazo peligroso a Granero y en todo momento se creció por arriba para desarmar a los pericos, cuya ofensiva se basó en mayor medida en la estrategia y los balones aéreos.
En ese camino hacia la estabilidad, Courtois ha podido, además, celebrar un registro importante. Una temporada y pocos meses después de su fichaje, el belga ha batido el récord personal de Keylor de minutos seguidos sin encajar. Sus 535 minutos suponen la sexta mejor marca en la historia del club.
Ya no hay dudas de que la temporada de Courtois se ha aclarado después de tantos nubarrones iniciales. Acumula ocho clean sheets y ha recibido 15 tantos en 17 encuentros, subiéndole notablemente la exigencia a los rivales para batirle. Ahora ha puesto el precio de los goles a un promedio de 9,8 tiros para superarle. Son los datos de Courtois, la otra cara, menos comentada, del éxito del nuevo Madrid.