El Valencia se lleva el derbi por Ferran y por orgullo
El canterano y Rodrigo anotaron los goles para dejar los tres puntos en Mestalla. Anguissa hizo el gol de los amarillos. Coquelin y Rodrigo se fueron lesionados.
El Valencia tendrá mil males y algún que otro defecto, pero irradia orgullo y transmite fe. El derroche físico que hicieron los de Celades contra el Chelsea tuvo su segundo capítulo contra el Villarreal, un derbi que se decidió por un gol de Ferran Torres y por la fuerza interior de los blanquinegros, que pese a sufrir dos nuevas lesiones (Coquelin y Rodrigo) hicieron con el empuje de Mestalla el gol del canterano. Ello ante un Villarreal que mostró mejor cara que ante Mallorca y Celta pero que suma ya cinco jornadas sin sumar la victoria.
La noche arrancó con la noticia de la lesión de Cazorla. El Villarreal saltaba así a Mestalla sin dos de sus principales referencias: Iborra y el asturiano. Sus ausencias servían para compensar el desgaste que arrastraban los blanquinegros de la Champions. A Celades, que sigue con la enfermería en hora punta, no le quedaba otra que repetir nueve futbolistas. Sus únicas novedades fueron Mangala y la vuelta a su hábitat de Coquelin.
La primera parte del derbi fue de porteros y también de entrenadores. Calleja supo mover la coctelera de su plantilla por las bajas y su apuesta por Anguissa, Trigueros y Morlanes le dio de salida el balón y mayor profundidad. El Villarreal pudo adelantarse en un penalti que erró Gerard o paró Cillessen (13'). Al holandés, demérito de Gerard al margen, solo le han marcado dos de los cinco penaltis que le han pitado al Valencia este año.
El Villarreal, pese al golpe anímico, continuó con el mando del partido. Pero Celades reaccionó sin necesidad de pasar por la caseta. El catalán retocó desde la banda su dibujo táctico, pasando a un 4-3-3, y con Coquelin, Parejo y Soler, el Valencia hizo suyo el balón e inclinó el campo hacia Asenjo, que recogió el testigo de Cillessen y evitó que los ché se adelantaran tras disparos de Soler (35'), Rodrigo (35') y Ferran (39').
La segunda parte del derbi fue la de los goles. Rodrigo, al que Soto Grado había anulado uno por fuera de juego (30'), rompió a la zaga amarilla con dos toques en carrera tras asistencia de Maxi Gómez (48'). Pero al Valencia la alegría le duró poco. Anguissa, tras una carrera en la que dejó en evidencia que las piernas de los blanquinegros estaban bajo mínimos de fuerzas, fusiló con pierna derecha a Cillessen desde la frontal (53').
El gol de Anguissa dio paso a una fase del partido de toma y daca. La tuvo Mangala y poco después Chukwueze. Ese fue el primero de los cambios de Calleja, a cada cual más ofensivo: el nigeriano, Ontiveros y Bacca. Cierto es que para cuando introdujo el segundo de ellos, Ferran Torres había adelantado a los de Celades (69'). El canterano se ha hecho con un sitio en el once y no tiene pinta que nadie le quite de ahí.
Quizás, en otras condiciones, el gol de Ferran hubiera dejado al Villarreal en la lona. Pero el Valencia tiene un hospital en lugar de un vestuario y las lesiones de Coquelin y Rodrigo, por no hablar del sufrido trote de los Parejo, Wass o Gabriel, dejaba a las claras que iba a haber partido hasta el noventa y más allá. Pero este Valencia compensa sus dolores con orgullo, pundonor y entrega. No hubo más goles y el derbi se quedó en Mestalla.