Sarabia fue jugador del Real Madrid... durante 18 minutos
Mourinho hizo debutar al madrileño en la 2010-11. Tras aquel partido ante el Auxerre, se marchó al Getafe en julio de 2011. Ahora triunfa en París.
A sus 27 años, Pablo Sarabia (Madrid, 1992) surfea el éxito a lomos de una de las plantillas más potentes de Europa. El trescuartista español disfruta de minutos de calidad en el PSG, aunque la recuperación de Neymar y Mbappé, además del estupendo momento que viven Di María e Icardi, le amenazan. Pero hasta el momento Tuchel ha confirmado con sus actos la confianza que le tiene: ha jugado 998 minutos en 15 partidos, anotando un gol y repartiendo cinco asistencias. Tiene complicado ser parte del once titular hoy, pero al menos regresa a un Bernabéu que le vio ser parte del primer equipo del Real Madrid durante 18 minutos, los del tramo final de un triunfo por 4-0 sobre el Auxerre, el 8 de diciembre de 2010.
Sarabia se crió en la cantera blanca, en la que ingresó en 2004 procedente de la Escuela de Fútbol Madrid Oeste de Boadilla del Monte, con sólo 12 años. De él repetía Antonio Díaz, extécnico de La Fábrica, que era el jugador “más diferente” del filial blanco, sobre todo por inclasificable: toque y técnica de fino centrocampista, llegada, golpeo y cifras de atacante. En esa polivalencia se apoyará para seguir sumando minutos en el PSG.
En 2010 su despegue fue completo: lo empezó debutando con el Castilla, el 3 de enero ante el Alcorcón; y lo despidió haciendo lo propio en el primer equipo, a las órdenes de José Mourinho. El portugués aprovechó un partido de rotaciones masivas para darle la alternativa a Sarabia, que entró en el 72’ en el campo en lugar de, nada menos, Cristiano. Se abría ante Sarabia un universo de posibilidades de blanco que acabarían no sucediendo.
En julio de 2011 fue traspasado al Getafe por tres millones; allí prosiguió su crecimiento (145 partidos, 15 goles, 20 asistencias) y, tras el descenso azulón a Segunda, se marchó a Sevilla en una nueva jugada maestra de Monchi; pescó por algo menos de medio millón a Sarabia, que dio el salto definitivo. Fue un fichaje aprobado por Emery, que acabaría por marcharse precisamente al PSG, pero Sampaoli supo aprovecharlo. En el club de Nervión jugó 151 partidos y se ganó el traspaso al PSG con su impresionante curso pasado: 23 goles y 17 asistencias.
Cambió de agente (dejó a su representante de toda la vida, Ginés Carvajal, para firmar con Pablo Barquero, también agente de Rodrigo, medio del City) y acabó en París, dejando en Sevilla 20 millones, dos más de lo que marcaba su cláusula de rescisión. Por el Parque de los Príncipes corretea hoy uno que fue blanco durante 18 minutos...