Kodro rompe la racha de El Sadar de 31 partidos sin perder
El exrojillo, que no celebró el tanto, selló el primer triunfo del Athletic a domicilio esta temporada. Unai Simón, imperial.
Todo el decorado apuntaba a apostar al rojo. Un equipo inmaculado durante 31 partidos en su fortaleza ante otro tembloroso a domicilio. Pero el fútbol es magia y subversión de pronósticos. El Athletic, llamado a ser la víctima propiciatoria, se desmelenó y Kodro (¡cría cuervos!) hizo el gol que rompía 602 días sin profanar El Sadar. Los leones leyeron muy bien el partido, pero la lesión de Raúl García, solo un dolor así de intenso en el pubis puede doblegar al mayor guerrero, obligó a quitarle al descanso, y sacó de foco a los visitantes. El Athletic ya acabó con un hito en 1959 en el antiguo estadio de San Juan de Pamplona (30 partidos sin perder) y volvió a vestirse de aguafiestas para romper la mejor marca de los últimos 50 años.
A El Sadar se sale a sufrir. A sudar, para tener felicidad. 31 partidos sin perder, un fortín donde prevalece el pico y la pala, donde uno se pasa hora y media suda que suda como una regadera y asiste a un catálogo de cargas, atascos, atropellos... Las emboscadas son constantes y aquí los monaguillos se quedan en el vestuario. El Athletic se tiró los mejores 35 minutos fuera de casa de toda la temporada. Interpretó muy bien lo que había que hacer, cómo dañar a un rival de tanto postín. Jugar cuando podía y si no, a mantener la posición. Osasuna arrancó como suele, presionando mucho y en la primera llegada, el equipo rojiblanco encontró el gol. Raúl García recogió un balón profundo y marcó. No lo celebró. El VAR advirtió tirando líneas que entre la cabeza del rojiblanco y la rodilla de un rival estaba más adelantada la primera. Cosa de milímetros. A Juan Villar también le tacharon uno poco después por otro chivateo del videoarbitraje.
Sancet, presencia luminosa como mediapunta cubriendo mucho campo, buscaba soluciones con el último pase y la defensa estaba imperial. Acabó extenuado por la exigencia de Primera. De sus botas salió la asistencia para el 0-1 de Williams. Se esperaba una manada de bisontes en el arranque, pero el equipo rojiblanco sujetó los caballos. Los inquilinos del frente de ataque se intercambiaban posiciones y eso pareció romper los esquemas de un equipo tan seguro de sí mismo en casa como Osasuna. Las embestidas, el ritmo… todo fue templado por la tropa de Gaizka Garitano.
El Athletic estaba muy asentado, pero en los diez minutos finales de la primera parte, se partió un poco y el bajón de intensidad le dio problemas. La estrategia le causó ciertos quebrantos y en cada córner le remataban con peligro. Ahí emergió un Unai Simón que sacó tres balones de gol. Los leones tapaban los centros laterales, estaban maduros, tenían llegada y dominaban con transiciones rápidas. Williams y Raúl cayeron en fuera de juego en otra internada que llevaba camino de gol.
Pero en el descanso, Raúl tuvo que sentarse por molestias en el pubis y temblaron las canillas de los visitantes. Capa tuvo una mala digestión cuando el Chimy cayó por su lado, y Rubén García estaba siendo el mejor de los navarros. Pero en una cita muy accidentada, este cayó también lesionado y tuvo que desfilar. Arrasate puso a Cardona y Adrián, dos jugadores con mucha menos sangre que el propio Rubén y Villar. Ávila se adelantó a Yuri e hizo el empate. El Athletic estaba desbordado. Desde su despacho, Garitano lo apreció y puso a San José para sujetar las líneas. Lo agradeció su tropa, que se graduó mejor la vista y en una jugada con tres errores por segundo, entre Lekue y Kodro resolvieron el 1-2. Williams, una pesadilla por la banda con su velocidad, se cebó en un contraataque y cuando tenía solo a Córdoba a la izquierda, para empujarla, abortó una jugada que podía haber cerrado el debate mucho antes del pitido en el 90’.
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Arrasate: "Sabíamos que la racha iba a terminar"
El entrenador de Osasuna, Jagoba Arrasate, ha considerado la derrota de su equipo frente al Athletic "una pena", aunque también ha admitido que los rojillos sabían que "iba a terminar" la racha de 31 partidos invictos en El Sadar.
Para el técnico, el Athletic ha sido superior a Osasuna en la primera hora de partido, "jugando mejor posicionados y no dejándonos hacer nuestro juego", pero en la segunda parte el equipo navarro ha estado más reconocible "arriesgando, empatando, y recibiendo un segundo gol que en principio era una acción fácil de defender".
"Hemos hecho un gran esfuerzo, sabiendo que podíamos sumar un punto", dijo Arrasate asumiendo que "esto es fútbol y que hemos cometido errores, a pesar de que vamos en buena línea, pero sabiendo que debemos mejorar".
Arrasate ha aceptado que han pasado "dificultades durante el primer tiempo" debido a lo complejo que ha sdco sacar de sitio a Capa y Yuri, consiguiéndolo finalmente en el segundo tiempo "donde tuvimos la ambición de ir a por el segundo para finalmente perder el partido".
Para el entrenador de Osasuna, ha dico en rueda de prensa, esta derrota "no debe afectar al vestuario" a pesar de que los primeros enfadados "somos tanto yo como los jugadores, pero esto es parte del fútbol y debemos pensar ya en el próximo partido que es muy importante".
Y ha añadido que "l segundo gol del Athletic es una pena porque, después de cómo estaba la gente y todo lo que nos ha costado empatar, que te metan un gol a los dos minutos es un mazazo", aunque ha asegurando que "el desenlace del partido seguro que hubiera sido otro".
Garitano: "Hemos merecido la victoria"
Gaizka Garitano, entrenador del Athletic, afirmó en la rueda de prensa posterior al partido ante Osasuna que su equipo "mereció la victoria" porque "supo sufrir el rato" que el conjunto navarro "apretó".
Para Garitano, el triunfo frente a Osasuna es "una liberación" ya que, a pesar de haber empatado varios partidos fuera de casa, "lo único que te justifica son las victorias", y aseguró que su equipo "la venía buscando desde hace tiempo".
Sobre la salida al campo de Kenan Kodro, jugador que no ha contado con muchos minutos, Garitano comentó que "el hecho de no ser de Lezama ha podido pesar". "Es uno de los mejores profesionales que tengo en la plantilla, además de que aquí estamos para apoyar a todos tanto en los buenos como en los malos momentos porque necesitamos de todos los jugadores", añadió.
"Sabíamos que teníamos que aguantar las arremetidas de ellos, ya que con jugadores de calidad como Roberto Torres o Rubén García podían hacernos daño", destacó. "Sabíamos que iba a haber momentos difíciles porque aquí sin sufrir no gana nadie", apostilló.
"Hemos tenido que hacer cambios por obligación porque nos faltaba frescura para apretar arribar ya que con Osasuna si te metes atrás acabas sufriendo", subrayó Garitano, y afirmó que en El Sadar "cuando te meten uno, parece que el segundo va a llegar a continuación". Sobre la primera titularidad de Sancet, Garitano opinó que es un jugador "diferente que tiene calidad y desparpajo", al que vio "muy bien participando en bastantes jugadas, incluida en la del primer gol, a pesar de que se le ha ido terminando la gasolina".
"La dinámica ha cambiado para bien gracias a los jugadores, a la afición y a todo el mundo que ha empujado, a pesar de que cuando las cosas van bien estás más alerta para que nadie se duerma", manifestó Garitano sobre la situación del equipo un año después de su llegada al conjunto bilbaíno.
"Tenemos fiabilidad, somos un equipo muy competitivo que prácticamente no tiene días malos", comentó Garitano.