Hércules: Ramírez dice basta y exige una reacción a la plantilla
El máximo accionista, junto a Ortiz, fue crítico y duro en su reunión con el vestuario. Amenazó con hacer una criba en enero si no se mejora.
Y Juan Carlos Ramírez explotó. El máximo accionista del Hércules, junto a Enrique Ortiz, dijo ayer basta y reunió al vestuario para mostrar su malestar por la situación deportiva del equipo. Ramírez fue duro y crítico con los jugadores. El empresario vasco exigió al grupo una reacción inmediata en una reunión en la que estuvieron presentes todos los futbolistas y el cuerpo técnico. Javier Portillo, director deportivo, y Carlos Parodi, presidente del club, fueron testigos del discurso.
Ramírez le pidió a los pesos pesados que diesen un paso al frente para volver a ilusionar a la propiedad. El vasco fue bastante claro en su mensaje. Incluso, amenazó con realizar una criba en enero si la plantilla no es capaz de enderezar el rumbo antes del parón navideño. Tras realizar un desembolso superior a los dos millones de euros, Ramírez reapareció en un vestuario que no pisaba por un motivo similar desde hacía bastante tiempo. El vasco entendió que el grupo necesitaba el toque de atención de una voz autorizada tras no funcionar los tirones de oreja que ha ido dando Javier Portillo a lo largo de toda la temporada.
Ramírez, caliente todavía por el pésimo partido que realizó el equipo ante el Mestalla, mostró su malestar por el hecho de que el equipo no compita y se haya dejado llevar en más de un partido. "Se puede perder, pero no dejando una imagen como la del domingo", deslizó. Además, el empresario informó al grupo que se han solucionado los pequeños retrasos que existían en las nóminas.
Ramírez espera que la reacción llegue este mismo domingo ante La Nucía. Diego Benito, uno de los capitanes, explicó la presencia del dueño en el vestuario. "Sabemos que no están contentos con nosotros igual que nosotros no estamos contentos con nuestro rendimiento. Ramírez ha sido moderado en su discurso porque todo se ha dicho con educación y respeto. No han sido palos, se han dicho verdades y las cosas a la cara. Los dueños también sufren y entre todos tenemos que sacar esto adelante”, dijo Benito.