"Disfruto del fútbol cada día, pero quiero jugar, no verlo por la tele"

¿Cómo vive el día a día sin un equipo alguien que lleva en la elite desde 2003?

Me entreno todos los días, siento que debo estar preparado por si en algún momento surge una propuesta interesante. Reconozco que cuesta, porque no es lo mismo entrenarse solo que en una dinámica de grupo, aunque los martes y jueves estoy con el Iberia, de Tercera Catalana. Estoy yendo también al centro de Manolo (González, coordinador médico del Espanyol) y por las mañanas al campo del Pomar, que además es donde juega mi niño. Le doy caña. No me dejo ir por si sale algo.

¿Y mentalmente?

Hay veces que se hace más difícil porque yo disfruto cada día del fútbol, pero me gustaría estar jugando, no viéndolo por la tele. Aun así, lo llevo bien. Es lo que me ha tocado vivir. Oportunidades me han salido, pero he decidido seguir entrenándome por ahora. También se trata de estar en mi casa, con la familia, con mis hijos… Si me sale un equipo, genial. Si no, tampoco pasa nada. La vida sigue y yo continuaré entrenándome y me dedicaré de un modo u otro al fútbol.

Es elección suya, al fin y al cabo.

Sí. Allá donde vaya será para estar bien, a gusto y para dar lo mejor de mí.

Sonó mucho el Zaragoza al final del mercado de verano…

Se hablaron cosas de varios equipos de España, no solo el Zaragoza, pero no me fui a ningún sitio porque no se acabó de concretar nada.

Por lo que comenta, no descarta retirarse. ¿Se ha planteado una fecha límite para tomar la decisión?

Si no me llega una oferta que me convenza, seguiré jugando pero con los amigos. Así me mantendré en forma, porque me gusta mucho el deporte. No me he fijado una fecha, pero no voy a estar todo un año entrenándome solo para no tener nada.

¿Se arrepiente de no haber aceptado la propuesta del Espanyol, de asumir un cargo en el área deportiva?

Ellos no querían que continuara en la plantilla, y ésa era una buena oferta, de hecho me encantó, pero no lo veía conveniente porque a mí por ahora me apetece jugar. En el futuro sí puede ser, sé que tengo las puertas abiertas en un club donde me he encontrado tan a gusto.

Y desde la barrera, sigue ahora la crisis de los pericos en LaLiga. ¿Cómo la vive?

Sufro, porque no es una situación fácil, y eso que en Europa están muy bien. Pero en LaLiga no están viniendo los resultados y es una lástima porque yo confío mucho en el equipo, en que pueda sacar esto adelante. Estoy convencido de la capacidad que tienen. Allí estaremos, yo desde fuera y estoy seguro que todos los aficionados, apoyándolos en todo momento para que se sientan arropados, que no están solos.

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¿A qué atribuye el 'pichichi' de Cornellà-El Prat que el Espanyol no haya sumado ni un punto en casa?

No sabría dar una respuesta. Veo los partidos y es verdad que está costando mucho crear ocasiones y meter goles pero no estoy dentro para comprender qué pasa. Hay que intentar cambiar alguna cosa, porque jugar en casa debe ser sinónimo de victoria. Espero que ante el Getafe suceda porque hay que empezar a sumar. No se trata de meter presión añadida, sino de una realidad porque los rivales van sumando y se pueden escapar. Seguro que los triunfos empezarán a llegar y podremos disfrutar.

¿El Espanyol con menos gol de la historia es un problema de juego, de nombres o de que cada verano se traspasa al máximo goleador?

No es fácil que cada año venga un goleador. A veces también son rachas, y los delanteros ahora mismo no la están teniendo, a pesar de que en otros equipos sí han metido goles. El equipo está jugando mejor, se trata de que si tienen una ocasión de gol, la metan, y mejor si la meten los delanteros, así cogen confianza. Yo confío en ellos. Esperemos no estar hablando a final de temporada de estos datos.

Otro mantra que usted podrá analizar mejor que nadie, como capitán que fue y que conoce a los jugadores, es que a esta plantilla le falta carácter. ¿Es cierto?

A lo mejor no lo aparentan, pero sí lo tienen. A mí me gustaría estar ahí, pese a la mala situación, que donde estoy fuera, porque sabes que puedes ayudar, hacer alguna cosa. Pero los que están pueden sacar esto adelante. Entre todos saldrán porque hemos tenido situaciones parecidas en años anteriores y se sacaron, aunque a nadie le guste llegar a ellas.

¿Cómo actuaría usted en esta situación?

Hay que animar a la gente. Hay jugadores que por su juventud no han vivido estar abajo. Y eso no es fácil. La única receta es estar todos a una, los veintitantos jugadores y el cuerpo técnico. Si va cada uno a lo suyo, es mucho más difícil. Y yo, por lo que sé, van todos a una. El grupo está con ganas de poder revertirlo, todos en una línea y que no se salga de ahí.

Igual que habla con excompañeros del Espanyol, ¿charla con Xavi Hernández, con quien coincidió en Qatar, sobre su etapa de entrenador y la crisis de resultados que también atraviesa?

Hablamos cada dos días con él porque somos amigos desde la cantera del Barça, y es cierto que sus últimos resultados no han sido los mejores, pero eso de que pedían su dimisión eran cuatro o cinco personas. En el club (Al Sadd) le transmiten mucha tranquilidad. Los resultados mandan, pero tiene un buen equipo y volverá a estar arriba.

¿Lo ve como futuro entrenador del Barcelona?

Sí, su manera de ver el fútbol coincide con la que tenía como jugador y, por tanto, con la filosofía del Barcelona. No sé cuándo será, si en tres o cuatro años, pero sí que entrenará al Barcelona.

Hablando de los azulgrana. ¿Su salto al primer equipo, en aquella noche del gazpacho, fue demasiado precipitado?

A lo mejor si hubiera entrado alguna de las ocasiones que fallé, alguna por el césped, todo habría cambiado. Nunca se sabe. No tuve muchas oportunidades, debuté porque no estaban los internacionales y fue precioso, como lo es estar tantos años en Primera. Lo difícil es mantenerte entre tantos grandes jugadores. Estoy encantado con la carrera que he tenido. El fútbol es mi pasión. Parece que fue ayer y han pasado muchos años rápidamente.

¿Borraría algún descenso? Se le llegó a colgar el cartel de que bajaba a sus equipos.

Eso son cosas que se dicen, un jugador no puede hacer que un equipo baje, son cosas de plantilla, de un cúmulo de circunstancias.

De esos grandes jugadores con los que comentaba que ha jugado, ¿a quién elegiría por encima del resto? ¿Ronaldinho, Messi, Iniesta…?

Ronaldinho o Messi son buenísimos, pero con Iniesta he coincidido tantos años, desde juveniles y hasta la Selección, ha sido el mejor con quien he podido jugar. Ha sido un grandísimo jugador… ¡De hecho, lo sigue siendo! En Japón lo sigue demostrando.

Mencionaba de pasada la Selección. Como campeón de la Eurocopa de 2008, en el inicio de aquel ciclo glorioso, ¿los ve entre los favoritos, o ha quedado España entre el montón de aspirantes?

Hay muchísimos jugadores españoles buenísimos y una grandísima Selección para lograrlo, con gente joven. Se puede ganar. A pesar de que los rivales son muy fuertes, confío en el papel de España. Pero fácil no lo van a tener, a nosotros nos costó y eso que fue una Eurocopa perfecta.

Y eso que usted entró casi sin imaginarlo…

Se rumoreaba que podía ir, pero yo no me lo creía porque ese año había estado muy bien pero no había ido nunca. Estábamos viendo el anuncio de la convocatoria en la tele, con los compañeros del Zaragoza, y cuando Luis Aragonés dijo Cazorla, yo pensaba que no tenía ninguna opción, porque todo el mundo decía que estaba entre él y yo, los que jugábamos de interior derecha. Después Luis me dijo que fui porque me lo había ganado durante todo el año.

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¿Ve a Gerard Moreno en ese rol en 2020?

Creo que se lo merecía antes. Con nosotros hizo una grandísima temporada, y ahora mismo es de los mejores indudablemente. La demostración son los goles que está metiendo. Ojalá que pueda seguir estando en la Selección hasta la Eurocopa.

No en la Selección pero sí en el Zaragoza coincidió con Gerard Piqué. ¿Cómo era él con 18 años?

En aquella época jugaba de pivote, ocasionalmente de central. Ya en categorías inferiores se le veían las cualidades, y en el Zaragoza estuvo muy bien. En cuanto a su carácter, él es así de toda la vida. Para mí es buena gente, pero cada uno tiene su manera de ver las cosas.

Son distintos tipos de capitán…

Sí, somos diferentes (sonríe), pero no hay un patrón de cómo debe comportarse un capitán, cambia en cada equipo y cada temporada.

¿Dónde se ve una vez cuelgue las botas?

Cuando yo me retire, quiero sacarme el carnet de entrenador y dedicarme al fútbol. Llevar un vestuario no es nada sencillo, observando a los técnicos tengo clara la enorme dificultad, pero es un reto que me apetece. De hecho, es lo único a lo que tengo en mente dedicarme. Y si tengo la suerte de llegar a la elite, me gustaría entrenar algún día en casa, en el Espanyol. Nunca se sabe, pero ojalá suceda.