Lampard pone firme al Chelsea
Una filtración revela el estricto código de disciplina que ha impuesto el inglés en el conjunto londinense: llegar tarde a un entrenamiento conlleva una multa de 23.000 euros.
El Chelsea de Frank Lampard se ha convertido por méritos propios en uno de los equipos revelación del comienzo de temporada. La leyenda del conjunto 'blue' ha dado un vuelco a la situación del club londinense: ocupan el tercer puesto en la Premier, cuentan con opciones de pasar a octavos de Champions, practican un fútbol atractivo con un alto porcentaje de jóvenes y ya han protagonizado algunos de los mejores partidos del curso futbolístico. Quizás la mejoría de los de Stamford Bridge se deba, en parte, a la disciplina que el técnico inglés ha instaurado en el club, una de las más férreas de la Premier League: según un documento publicado por GiveMeSport que luego dio el salto a Reddit, llegar tarde al entrenamiento de los 'blues' se paga con una multa de 20.000 libras (23.357 euros, aprox.).
El escrito filtrado recoge doce supuestos bajo los que se les impondrían diversas sanciones a los futbolistas del Chelsea para la presente temporada. La más alta es la ya mencionada por no estar al comienzo de un entrenamiento, seguida por la de no comunicar una dolencia o enfermedad, como mínimo, noventa minutos antes del comienzo de la sesión de trabajo: la multa se cifra en 10.000 libras (casi 11.700 euros). Por su parte, ausentarse de compromisos corporativos o de trabajos comunitarios, así como ausentarse del viaje de vuelta a Londres sin previo aviso de 48 horas, sale a 5.000 libras (casi 6.000 euros).
Llegar tarde a las instalaciones antes del entrenamiento sale a 2.500 libras más otras tantas por cada quince minutos adicionales de retraso. Además, los futbolistas 'blues' deberán pagar la misma cantidad si no están a la hora estipulada para un partido en Stamford Bridge, para la de salida del autobús si juegan fuera y tanto por retrasarse a cualquier cita con los servicios médicos del club (tratamientos e inspecciones varias). Los londinenses también sancionarán con mil libras el presentarse con la equipación equivocada antes del partido o del viaje y que un teléfono suene durante una reunión de equipo. Asimismo estas sanciones, según indica el documento, "deberán ser pagadas en catorce días, plazo tras el que cualquier multa será doblada" y todo el dinero recaudado irá destinado a acciones solidarias, sean o no del Chelsea. Por último, se estipulan cinco normales internas adicionales entre las que destacan la necesidad de autorización del entrenador para que acudan familiares al entrenamiento o la prohibición de agentes dentro del campo de entrenamiento.
De momento, la disciplina parece estar funcionándole a Lampard, que ha aprovechado la derrota del City en Anfield para asaltar la tercera plaza tras su victoria por 2 a 0 ante el Crystal Palace. "Decir que somos candidatos al título sería un poco ingenuo porque ni siquiera llevamos un tercio de la temporada, pero si conseguimos mantener este estado de forma y de resultados, creo que podemos cerrar la brecha (con el Liverpool)", explicó el técnico inglés al término del encuentro.