Biri Biri, el ídolo del Sevilla que pudo ser del Real Betis
El atacante gambiano jugó cuatro temporadas en el conjunto hispalense y se convirtió en un personaje admirado en el Sánchez-Pizjuán.
Alhaji Momodo Nije. A priori, ese nombre no le dice mucho al aficionado al fútbol. Sin embargo, el apodo de Biri Biri sí que es mucho más reconocible. El futbolista gambiano, nacido en marzo 1948 en Banjul y considerado el mejor de la historia de su país, marcó una época en el Sevilla en los años 70. En el club hispalense lució todo su fútbol y dejó una huella imposible de borrar. Pero estuvo cerca, o eso dicen los sabios del lugar, de jugar en el eterno rival.
El fútbol de los 70, dicen los que lo vivieron, era diferente. La década estuvo marcada por Johan Cruyff, la aventura de Pelé y Franz Beckenbauer en el New York Cosmos, el penalti de Panenka o la Brasil de Pelé, considerada como uno de los mejores equipos de la historia. Sin embargo, en el Sevilla FC ese periodo de tiempo será siempre recordado por la figura de Biri Biri, un jugador de leyenda para la entidad hispalense.
Llegó al Sevilla con 25 años y después de jugar en la liga de Gambia y en el Derby County, llegando a ser entrenado por Brian Clough. Fue el primer futbolista africano en jugar en el extranjero y el primer jugador negro en vestir la camiseta del conjunto sevillista. Biri Biri era fuerte, veloz y con una polivalencia destacable para moverse por todo el flanco de ataque. Su derroche y entrega física pusieron de pie a la afición, tal y como recuerda Pablo Blanco, que fue compañero suyo: "Fue un revulsivo para la afición del Sevilla y el Sevilla en general. La gente le venía a ver porque era un espectáculo. Transmitió sensaciones muy pronto al sevillismo".
José María del Nido, ex-presidente sevillista, recordó en Fiebre Maldini, hace más de diez años, los inicios de Biri Biri en el Sevilla: "Una de sus situaciones más características era la singularidad de su posición antes de rematar los saques de esquina. Estaba agachado siempre, apoyado sobre sus rodillas".
Biri Biri pudo ser del Betis
Cuentan las crónicas de la época que Biri Biri estuvo a un paso de fichar por el Betis. El africano desempeñaba su carrera en el B 901, un equipo danés pequeño y el conjunto verdiblanco parecía tener pactado el fichaje con el agente en el verano de 1973.
No obstante, cuando volaba a Sevilla hubo un giro dramático en los acontecimientos. Iba en el avión junto al entrenador de su equipo en el momento que conoció a Juan Ramón Rodríguez, un emigrante de Huelva que entrenaba al Randers Sportsklub Freja, uno de los decanos del fútbol danés. Juan Ramón era un gran aficionado al Sevilla. Se puso en contacto con el club sevillista para recomendarles a Biri Biri antes de convencer al propio futbolista gambiano para que fichara por los de Nervión.
Un héroe de culto en Sevilla
Biri Biri militó cuatro temporadas en el Sevilla (1973-1978), pero estuvo un año sin jugar por "problemas contractuales". En sus dos primeras temporadas, en Segunda División, anotó 25 goles. Fue tal la huella y la marca que dejó, que se creó una peña en su honor que sigue siendo importante en el entorno sevillista: los Biris. El propio Pablo Blanco, en una entrevista en Fiebre Maldini, recuerda el porqué de la creación de la peña: "Después de un partido espectacular suyo, lo esperaron a la salida del campo y lo sacaron a hombros y lo llevaron hasta su casa. A raíz de ahí nació la peña Biri". En total, el atacante de Gambia disputó 99 partidos con el Sevilla y anotó 32 goles en cuatro temporadas.
Tras dejar el cuadro nervionense, Biri Biri se marchó al Herfølge BK danés. Una temporada aguantó en Dinamarca antes de volver al Wallidan Banjul, donde jugó seis temporadas (1981-1987) antes de retirarse. Alhaji Momodo fue ministro de deportes de Gambia antes de ser nombrado alcalde suplente de Banjul en 1994 cuando el presidente Yayah Jammeh llegó al poder. En el año 2000, el presidente de Gambia, le otorgó la Orden del Mérito y fue nombrado como el "mejor futbolista del último milenio y de todos los tiempos" en Gambia.
El término héroe de culto suele utilizarse referido a actores o músicos, pero no hay término mejor para definir lo que significó Biri Biri para el Sevilla. Un pionero en su país y continente y un futbolista que revivió a la afición sevillista con su garra, su pasión y su implicación en el terreno de juego.