Payet reina en el Vélodrome
El doblete de la estrella del Marsella fue suficiente para conseguir los tres puntos frente a un Lyon que sigue sin carburar con Rudi García.
El Olympique de Marsella venció por 2-1 al Olympique de Lyon en el choque que cerraba la jornada 13 de la Ligue 1. Payet, con un doblete, fue la figura del partido. El equipo de Villas-Boas se coloca 2º en la tabla con una de las plantillas más limitadas de los últimos años.
Volvía Rudi García a la que fue su casa durante dos temporadas. Y lo hacía como técnico del máximo rival -junto al PSG- del OM. El técnico sufrió graves insultos a su llegada al estadio y vivió un auténtico infierno en el Velódrome. Los hinchas del conjunto marsellés no olvidan la "traición" de marcharse al Lyon tras haber entrenado al OM. Villas-Boas, por su parte, repitió prácticamente el once que ganó al Lille con Boubacar Kamará volviendo a actuar como mediocentro defensivo.
El partido comenzó con la emoción y la tensión que caracteriza al derbi. El Lyon pareció sentirse cómodo en los compases iniciales, buscando atacar la espalda de los laterales del OM y encontrando la ocasión más clara del partido en el minuto 10, cuando Aouar dejó solo a Cornet con un magnífico pase que terminaría en una gran intervención de Mandanda.
El planteamiento de Villas-Boas fue idéntico al de la semana pasada contra el Lille. El OM fue un equipo replegado, que no dejó espacios por dentro y que castigó sobretodo las jugadas que no finalizó el rival. A la contra, Payet, Sanson y Maxime Lopez fueron una pesadilla para Thiago Mendes, que dejó mucho espacio a su espalda. En el minuto 12, precisamente Mendes cometió un penalti absurdo tras intentar controlar una pelota que le golpeó en la mano. Payet transformó el penalti, que tuvo que retrasarse cinco minutos por una colleja de Benedetto a Dubois que revisó el VAR.
El Lyon de Rudi se ha convertido en un equipo atípico en el cual los centrales hacen de mediocentros y los mediocentros apenas participan en la salida de balón. Rudi se equivocó colocando a Aouar en el doble pivote, siendo éste un jugador más determinante cerca del área. Aunque terminó colocándole de interior, la decisión llegó demasiado tarde, pues en otra jugada que no terminó el Lyon, Payet, que estaba siendo el mejor del OM en cada contragolpe, remató fuerte y raso al palo largo de Lopes, que no pudo hacer nada por impedir el gol. Fue el resultado del repaso que le dio Villas-Boas a Rudi García en la primera mitad.
El partido estuvo interrumpido en los primeros compases de la segunda parte por el humo generado por bengalas encendidas por los ultras del OM. Sorprendió Rudi García quitando a Adélaïde al descanso habiendo sido el mejor jugador del OL en la primera mitad, para dar entrada a Jean Lucas, un mediocentro de corte más defensivo que ofensivo y que no se incorporó al ataque durante toda la segunda mitad. Para más inri, Aouar se lesionó en el minuto 55, entrando Rayan Cherki en su lugar.
Moussa Dembelé fue una de las claves del Lyon en la segunda parte. El delantero remató un gran centro de Dubois, ganándole la posición a Álvaro González y a la jugada siguiente forzó la expulsión del central español. Fueron minutos en los que el Lyon se sintió cómodo, pero tras la roja, no arriesgó y sufrió las consecuencias de no tener a sus tres mejores jugadores de ataque en el campo (Memphis, Aouar y Adélaïde). No hubo remontada y los tres puntos se quedaron en Marsella. Victoria importante para los de Villas-Boas.