Real Madrid: cuatro penaltis que han costado siete puntos
Jugadores, directivos y aficionados madridistas protestan por la no señalización de tres claras penas máximas que les han impedido estar en una zona más cómoda.
Al término del partido entre el Madrid y el Betis, el enfado crecía entre directivos, jugadores y aficionados madridistas. Más allá del juego de los blancos, la irritación encontraba el foco en la acción de Feddal dentro del área, cuando cortó un centro de Benzema. Lo que en otras temporadas era penalti (sin ir más lejos, en el Clásico disputado en el Bernabéu en la temporada 2014-15, Piqué golpeó con la mano al balón en el área tapando un centro de Marcelo, señalándose la correspondiente pena máxima), ante el Betis no se consideró. Pero la queja va más allá porque los blancos se sienten perjudicados en este comienzo de temporada. Consideran que no se les ha señalado cuatro claros penaltis que le han costado siete puntos contando con la jugada ante el conjunto bético: los tres posibles ante el equipo verdiblanco (sumó uno), lo mismo ante el Villarreal (sumó otro en la jornada tres) y otros tres ante el Mallorca (novena jornada), partido que perdió y en el que reclamaron dos penaltis.
El primer penalti del que tienen queja sucedió en la tercera jornada. Los blancos se enfrentaban al Villarreal en el estadio de la Cerámica. Casi al final del encuentro, en el minuto 87 (con empate a dos tantos en el marcador), Vinicius cayó en el área amarilla tras una entrada de Albiol. En la secuencia, se ve que el defensa valenciano, en su intento de despejar el balón, golpeó al brasileño dentro del área. El colegiado de aquel encuentro, Gil Manzano, no señaló nada. Tampoco fue avisado por el colegiado del VAR, González González.
La segunda acción polémica que se reclama es un agarrón de Salva Sevilla a Brahim, al que estuvo sujetando dentro del área a la salida de un córner. La clara acción tampoco fue señalada ni por el colegiado del encuentro, Alberola Rojas, ni por el árbitro de VAR, Iglesias Villanueva. Es más, en ese encuentro, los blancos se quejan de otras dos acciones más: un derribo de Lago Junior a Casemiro (previamente el árbitro había señalado fuera de juego del brasileño que las distintas tomas de televisión demostraron que era inexistente) y otro agarrón de Raíllo sobre Sergio Ramos. El Madrid, que perdió 1-0, cree que fue perjudicado gravemente.
La tercera es la acción de Feddal, cortando la trayectoria del balón con la mano. Los blancos consideran que llueve sobre mojado, sobre todo desde la jugada entre Rulli y Vinicius de la pasada temporada: sucedió en enero de este año, el brasileño fue derribado por el portero de la Real Sociedad, al que había superado en un uno contra uno. Ante la sorpresa de los aficionados, el colegiado del encuentro (Munuera Montero) no señaló nada ni tampoco le avisaron desde la sala VAR para que revisase la jugada (estaba Melero López), provocando que Florentino Pérez se pusiese en contacto con Luis Rubiales para quejarse por el VAR.