La falta de gol lastra al peor Atlético con Simeone al mando
El Atlético del Cholo suma 20 puntos, su peor cifra junto a la pasada temporada. El año que se llevó el título liguero sumaba diez más, 30 puntos. Ese año, a estas alturas, llevaba 28 goles.
La falta de gol está lastrando al Atlético. El partido ante el Alavés mostró lo que está siendo el equipo madrileño en este primer tercio de la temporada. Ofreció una mitad muy floja, sin tener ocasiones y muy presionado por un rival que vio la manera de hacerle daño a los rojiblancos. Tras el descanso el partido fue otro y entonces el Atlético fue dominador del mismo. Marcó Morata, pero pudo hacer el 0-2 y perdonó. Incluso Correa tuvo otra oportunidad clara. El Atlético tiró tres veces a puerta y media docena fuera para hacer un gol. Muy poca cosecha.
Gol a gol el Atlético se encalla. Ha marcado once tantos en once partidos ligueros. A un gol por partido. Muy pobre bagaje, Es el peor registro goleador del Atlético a estas alturas de la temporada. Iguala las cifras de tres campañas (1971-72, 2004-05 y 2005-06). Con estos tantos cualquier error en defensa propicía que el rival te pueda empatar. Así sucedió, por ejemplo, ante el Valencia y el Alavés. Cuatro puntos que podrían poner al Atlético en lo alto de la tabla.
La falta de gol lastra al Atlético y propicia que Simeone iguale su peor registro en el equipo madrileño en lo referente a puntuación. Lleva 20 puntos en once jornadas, igual que la pasada campaña. Muy lejos quedan los 30 del ejercicio en el que ganó el título liguero. La diferencia es abismal y tiene alguna explicación.
El año que el Atlético ganó el título liguero llevaba 28 goles a estas alturas de temporada. El Atlético llevaba 17 goles más. Casi el triple. Esa frescura arriba y esa definición en punta es la que no tiene ahora el equipo. Diego Costa estuvo en el mejor momento de su carrera, muy diferente al actual.
Los 20 puntos propician que el Atlético no asalte LaLiga de manera definitiva. Está pero no está. Cuando da la impresión de que se mete en la lucha por el campeonato se frena de nuevo. La afición anda un poco desconcertada. Se marcha fría y triste ante el Valencia, contenta y revitalizada frente al Athletic y de nuevo se disgusta por lo visto ante el Alavés, partido que el Atlético siempre debió ganar.