La asignatura pendiente de Míchel es el balón parado
El Huesca ha recibido seis de los nueve goles encajados a balón parado y todavía no han marcado un tanto de estrategia.
El equipo altoaragonés ha sacado 73 saques de esquina y de momento no ha llegado un solo tanto en las 12 jornadas que acumulan los azulgranas. Unos goles que son muy recurrentes en la categoría de plata y que los oscenses echan de menos, ya que hasta el momento solo han marcado 12 tantos, uno por jornada. Como solución, el entrenador podría tirar de Eugeni Valderrama, que demostró la pasada temporada, ya que fue uno de los mejores jugadores utilizando el balón parado y de momento, el preparador madrileño solo lo ha utilizado en seis encuentros como titular.
En defensa, los azulgranas estarán obligados a reinventarse por la expulsión de Josué Sá. Pablo Insúa, que está en perfectas condiciones y con el alta médica es una posibilidad, y Datkovic, que volvió a tener minutos tras la roja del portugués, es la otra alternativa que tiene Míchel Sánchez. Dos jugadores especializados en el juego aéreo y que pueden ayudar a Jorge Pulido en el preocupante problema del balón parado.
Míchel cerrará la puerta de tres entrenamientos
Los problemas que tiene que solucionar Míchel los abordará a puerta cerrada a lo largo de esta semana. El técnico, que solo había trabajado en la intimidad un entrenamiento semanal, preparará el choque ante el Elche con tres sesiones sin prensa ni aficionados. Los azulgranas volverán a los entrenamientos este martes y completarán la semana con cinco más.