Sergio González: centenario en Primera y muy cerca de renovar
Ante el Athletic dirigió su partido número 100 en Primera, mientras espera prolongar su vinculación como técnico blanquivioleta esta semana.
El punto conseguido en San Mamés dejó más felices a los blanquivioletas que a los bilbainos. También Sergio González se mostró más satisfecho que Gaizka Garitano tras el final del partido. Y es que el técnico barcelonés tenía motivos variados para sonreir en el estadio rojiblanco. No sólo su equipo sumaba un empate en un campo complicado y se mantiene en la parte media de la tabla, sino que podía celebrar su centenario como entrenador en Primera División. Pese a haber sido amonestado por Gil Manzano en el minuto 58 por protestar una decisión de los árbitros, el entrenador salió con una sonrisa en la boca, entre otras cosas, al ver a su mujer e hijos con una camiseta conmemorativa de ese día que rezaba: “Mister 100”.
Y es que no es tan fácil alcanzar este número de encuentros como técnico en Primera. De esta manera, a los 53 encuentros que dirigió en el primer equipo del Espanyol (18 victorias, 12 empates y 23 derrotas) se suman los 47 partidos, sumando el de Bilbao, en los que ha sido el máximo responsable de los pucelanos, en Primera División. El de San Mamés fue su empate número 16, a lo que hay que sumar 12 victorias y 19 derrotas.
Pronto, top10. Hoy Sergio González ocupa el decimotercer puesto entre los entrenadores del Real Valladolid que más partidos ha dirigido en Primera, pero el sábado, ante el Eibar, empatará con un histórico como Saso que dirigió 48 encuentros en la máxima categoría. De hecho, en los próximos encuentros seguirá ascendiendo puestos porque Rafa Yunta ha dirigido 49 partidos y García Traid, 50, por lo que después del encuentro ante el Mallorca pasará a estar entre los 10 entrenadores que más partidos estuvo al frente del Pucela en Primera División.
Todo esto se produce en la semana en la que el actual técnico podría firmar la renovación con el club blanquivioleta, en principio, por dos temporadas lo que le vincularía al club hasta junio de 2022. Los flecos por cerrar cada vez son menos y la firma del contrato parece inminente para prorrogar la unión de un técnico que llegó a un club y a un equipo moribundo en abril de 2017, consiguió un milagroso ascenso en la promoción y la temporada pasada firmó otra gran gesta logrando la permanencia con el presupuesto más humilde de Primera. El barcelonés, completamente adaptado a la ciudad, con su familia tiene razones para celebrar.