"No hay ninguna crisis; el inicio ha sido muy positivo"
Atienza considera que cualquiera hubiera firmado antes de empezar la temporada el cuarto puesto en el que está situado el Zaragoza y que para mantenerse arriba deben ganar al Mirandés.
—¿Qué valoración hace de lo que se lleva de temporada?
—El inicio ha sido bueno. Sólo llevamos dos derrotas en once jornadas y estamos metidos arriba. El otro día el equipo mereció más, al menos para haberse llevado un empate y estar en ascenso directo. No lo pudimos conseguir, pero yo valoro como muy positivo este inicio.
—El equipo está en puestos de playoff, pero se habla de crisis tras perder un partido. ¿Cómo se toma esto el vestuario?
—Crisis para el que ponga esa palabra. Yo creo que no hay ninguna crisis y que el inicio ha sido muy positivo. El equipo está haciendo las cosas bastante bien y habiendo sumado en Fuenlabrada estaríamos en ascenso directo. Estamos en una posición privilegiada que cualquiera de nosotros la hubiese firmado antes de empezar la temporada. Venimos de perder y hay que afrontar el partido contra el Mirandés con la toda la ilusión de volver a ganar.
—¿En el vestuario notan la exigencia de tener que salir a ganar cada partido si se quiere estar arriba?
—Cuando un equipo se quiere mantener arriba cada partido es decisivo. Si ahora no ganas, está claro que los demás vienen apretando y te pasarán. Un equipo que quiere conseguir un objetivo como el ascenso debe salir a cada partido no como una final, pero sí sabiendo la importancia que tiene. Sabemos que si ganamos al Mirandés daremos un paso importante y no queda otra que sumar los tres puntos para seguir mirando hacia arriba.
—El Zaragoza ya no volverá a jugar en Liga entre semana hasta enero. ¿Es un alivio?
—La verdad es que en ese sentido llevábamos un empate y una derrota. Es algo anecdótico, pero ahora ya preparas los partidos de domingo a domingo, hay más días para recuperar y eso nos beneficiará.
—¿Cómo llega físicamente el equipo al próximo partido? ¿Están algo justos en ese aspecto?
—Yo no sé los datos exactos de cada uno. A nivel personal me encuentro bien y no sé si alguno por molestias o por venir de alguna lesión… Al final eso se nota, pero creo que el equipo llega a los últimos minutos bien: continuamos atacando, seguimos sometiendo a los rivales y yo vi el otro día a jugadores del Fuenlabrada que estaban muy cansados después de estar casi todo el partido detrás del balón. Lo que hay que hacer es recuperarse bien, ya que acabamos de tener un partido y hay que estar preparados para el próximo.
—¿Les preocupa el número de goles que están encajando en estos momentos? ¿Le encuentran explicación?
—Ya hemos dicho muchas veces que hay que cambiar esta dinámica. En esta categoría es muy importante mantener la portería a cero y últimamente no lo estamos consiguiendo. Es algo vital para sumar tres puntos en esta categoría tan difícil. Hemos encajado algunos goles en estrategia que podrían ser evitables y otras veces se nos pone el marcador en contra y nos volcamos, dejando espacios atrás que nos están penalizando. Los otros equipos te llegan una o dos veces claras y las están aprovechando. Eso también influye y creo que esos pequeños detalles nos están penalizando.
—El equipo está teniendo problemas a balón parado tanto en defensa como en ataque. ¿A qué se debe?
—El día del Málaga y el del Cádiz fueron los dos días que encajamos gol a balón parado y que no estuvimos bien en esas acciones. Ya dije hace unos días que yo debería haber hecho más, pero salvo en esos dos goles no hemos sufrido en exceso. El gol del Fuenlabrada no creo que sea un problema de cómo defiende el equipo, sino un buen golpeo de ellos, y precisamente era un equipo muy poderoso a balón parado y creo que en cuanto a córners o en cuanto a faltas no nos generaron. En ese sentido creo que en estos dos últimos partidos hemos mejorado eso y está claro que no podemos encajar goles a balón parado porque el equipo está haciendo las cosas bien, los partidos están siendo igualados y se pueden decantar de esta manera. En ataque es cierto que hay que poner más atención, tanto los que lanzan como los que entramos a rematar. Hay que sumar algún gol en este tipo de acciones porque llegamos mucho y no lo estamos haciendo.
—Da la sensación de que los rivales, sin proponer nada y esperando atrás, se terminan llevando el gato al agua. ¿Lo considera injusto?
—Hay muchas formas de jugar y de afrontar los partidos. Es lícito que cada equipo juegue como considere. Está claro que nosotros proponemos mucho, arriesgamos en muchos momentos y los otros equipos no. Es muy respetable venir a replegarse, dar el balón y esperar el fallo y hay muchos equipos que se benefician de ello. Al principio la dinámica era la misma y estábamos consiguiendo resultados, así que no creo que haya que dar demasiada importancia a esto.
—¿Están preparados para jugar partidos de ese tipo?
—Sí, ya lo hemos demostrado. El partido contra el Elche fue de ese tipo, un equipo que se mete atrás y no te deja espacios y demostramos que los podemos ganar. Cada uno que venga a jugar aquí como quiera; nosotros sabemos el tipo de juego que tenemos que hacer. Debemos tener paciencia si se nos plantea un partido así y sabemos que el encuentro dura noventa minutos.
—La competencia en el centro de la zaga es grande, pero usted se mantiene fijo en el once.
—Estoy agradecido al míster por la confianza que me está dando. Hay compañeros que están haciendo las cosas bien y son muy buenos, pero el míster, por suerte, está confiando en mí y me está dando esa continuidad. Yo debo seguir demostrándole cada día que quiero seguir jugando.
—Arriba el equipo cuenta con las bajas de Dwamena y Pombo. ¿Es un gran contratiempo?
—Está claro que son jugadores importantes, pero la plantilla es muy amplia y todos estamos capacitados para salir y hacer las cosas bien. Seguro que los que salgan a jugar contra el Mirandés harán las cosas igual de bien.