El Galatasaray mide su crisis antes del Madrid
El equipo turco, décimo en su Liga, recibe al Sivasspor. El Galatasaray atraviesa uno de los habituales incendios entre los grandes clubes de Estambul.
El Galatasaray atraviesa uno de los habituales incendios entre los grandes clubes de Estambul pero no le podía pillar en peor momento: está empleándose con las mangueras justo a cuatro días de que el Real Madrid llegue a suelo otomano. Hoy, el Cimbom tiene la oportunidad de rebajar los grados de calor al norte del Cuerno de Oro ganando al Sivasspor, segundo en una tabla clasificatoria en la que el próximo rival europeo madridista es décimo. Muy lejos, por sensaciones, de un equipo diseñado para ganar la Süper Liga turca. Pero es que entre partidos domésticos y la Champions, los leones de Estambul no ganan desde hace un mes. Y un mes, en Turquía y ante una afición tan fervorosa, es casi una vida.
Un estado de crisis en el que se entremezcla también la gasolina de los problemas extradeportivos, entre ellos los retrasos en los pagos de las nóminas de la plantilla que han empezado a solventarse. Fatih Terim se las tendrá que apañar hoy, de nuevo, sin Falcao. El Tigre está enjaulado por culpa de un dolor persistente en el tendón de Aquiles que le impide ejercitarse con normalidad desde hace diez. Al Sivasspor parece que no llegará y es duda, ahora mismo, ante el Madrid.
Cambios. Terim, una institución en Turquía, moverá su once inicial en este compromiso ante el Sivasspor. El excéltico Emre Mor entra por otro viejo conocido de la afición española, Feghouli. El sueco Jimmy Durmaz se proyecta como titular en lugar de Ryan Babel, que no ha empezado bien y Ozbayrakli será el dos en lugar de Mariano, que está sancionado. Se espera una remozada defensa con el japonés Nagatomo y el congolés Luyindama jugando de inicio. Al frente de todo, el contrafuerte que sostiene todo el equipo, el exsevillista Nzonzi.
Para el Galata es vital recuperarse al abrigo del estadio Türk Telekom (el sustituto del famoso Ali Sami Yen) porque en Europa se encuentra en posición igual de precaria que el Madrid. Tiene los mismos puntos que los blancos (uno, de su empate en Brujas) pero, a diferencia del equipo de Zidane, la liga turca no está siendo un bálsamo para ellos...