Simeone varió a tres centrales... en otro día con la puerta a cero
La baja de Lodi, único lateral izquierdo puro, provocó que el Cholo apostase por una zaga de tres centrales con Trippier y Saúl de carrileros.
El Atlético dijo adiós durante el verano a Godín, Juanfran y Filipe, tres jugadores que formaron parte de una de las defensas más precisas y perfectas de la era moderna. Además, el joven Lucas también decidía salir al Bayern pese a que estaba llamado a ser el líder de la zaga rojiblanca en el futuro junto a Giménez. Sin embargo, por el momento, la vida sigue igual en el Atleti.
Ya son dos jornadas ligueras cerradas con victoria y sólo ha hecho falta dos goles para ello. Y es que la defensa de Simeone sigue siendo un ensamblaje perfecto a pesar de las caras nuevas. Y de la táctica, ya que el Cholo programó su primera victoria ante el Leganés en Butarque con una zaga configurada por tres centrales y dos carrileros, una formación usada en muy pocas ocasiones por el técnico argentino. La baja de Lodi, que vio la roja en el partido contra el Getafe, dejó al Atlético sin su único lateral izquierdo puro de la primera plantilla.
Hermoso parecía la primera opción para suplirle, sin embargo lleva tres años (desde el Valladolid) sin jugar como lateral. Saúl también ha tenido minutos en ese puesto con asiduidad, pero pierde llegada y no se encuentra cómodo. Simeone señalaba a Manu Sánchez, del B, como alternativa, pero finalmente fue uno de los descartes en la convocatoria. Así, el Cholo apostó por una zaga compuesta por tres centrales y dos carrileros. Savic a la derecha, Giménez en el medio y Hermoso en la izquierda con Trippier mandando en el carril derecho, lugar en el que brilló en el Mundial de Rusia con Inglaterra, y Saúl en la izquierda, menos exigido en tareas defensivas.
Una táctica que fue variando con el partido, con Lemar ocupando el puesto de Saúl en los últimos 15 minutos de primera mitad y volviendo a una defensa de cuatro atrás con la sustitución de Hermoso por Vitolo, el hombre del partido, en el minuto 60. Ahí el ilicitano pasó al lateral, al igual que Trippier, con Savic y Giménez como pareja de centrales. Por último, en el tiempo de descuento, la entrada de Felipe por Lemar volvió a situar una zaga de tres centrales para despejar las últimas intentonas pepineras.
La defensa renovada del Atlético, con cuatro caras nuevas de los siete zagueros de la plantilla, hasta el momento está funcionando a la perfección. Savic y Giménez, los más veteranos atrás, se complementan a la perfección, aunque el uruguayo se ve obligado a jugar en el perfil izquierdo. El montenegrino ha comenzado el curso como uno de los grandes destacados del Atlético, seguro por arriba, rápido al cruce y fuerte al choque. En la derecha, hasta el momento Trippier se ha adaptado como un guante, asistiendo a Morata en el gol del triunfo contra el Getafe y dejando de nuevo muy buenas sensaciones contra el Leganés y en la izquierda se esperan grandes cosas de Lodi a pesar de su agrio debut.
La zaga sigue salvaguardada por Oblak, que hasta el momento acumula dos porterías a cero sin apenas trabajo. Con la ayuda de los palos, que detuvieron los lanzamientos de Ángel contra el Getafe y Jonathan Silva ante el Leganés, el esloveno a penas ha tenido que actuar en el inicio de curso. Frente a los azulones no tuvo a penas trabajo y contra los pepineros resolvió con facilidad los tres lanzamientos de los jugadores locales. Dos metas a cero sin necesidad de recurrir a sus milagros a los que ha acostumbrado a su afición. El unocerismo funciona y el Atlético se encuentra colíder tras superar dos de sus mantras, ganar en la primera jornada y superar al Leganés en Butarque.