NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

BUNDESLIGA

El día que el Union de Berlín resucitó a los muertos

Sus familiares y amigos habían pagado la entrada para que sus seres queridos pudieran estar presente, aunque fuera a través de una foto, en un día tan importante para el club.

El día que el Union de Berlín resucitó a los muertos
ANNEGRET HILSEREUTERS

La Bundesliga sigue sin tener el mejor cartel en Europa. El dominio del Bayern y el bajo número de estrellas la sitúan por detrás de la Premier o LaLiga, pero momentos como el vivido el pasado domingo en Berlín explican la magia que sigue desprendiendo la máxima competición alemana. Debutaba el Union en la Bundesliga. La Alte Försterei nunca antes había albergado un partido en la élite germana y, para inmortalizar el histórico día, decidió rendirle homenaje a aquellos hinchas que por desgracia no pudieron ver a su querido Union disputar un partido en la Bundesliga.

No fue una sorpresa. El club había anunciado el acto con algunas semanas de antelación ya que la organización así lo requería, pero fue apreciar las gradas del modesto feudo del club berlinés y no poder contener la emoción. Un gran número de aficionados mostraba fotos gigantescas con las caras de aficionados fallecidos antes de que su club diera el salto a la gloria imponiéndose a todo un Stuttgart en la promoción este pasado mes de julio. Sus familiares y amigos habían pagado la entrada para que sus seres queridos pudieran estar presente, aunque fuera a través de una foto, en un día tan importante para el club de sus amores. Hubo lágrimas, está claro. Tanto en la grada como sobre el césped.

El Union no pudo redondear la tarde y finalmente cayó por 0-4 ante el RB Leipzig de Nagelsmann. Eso sí, la campaña de los 455 Unioner fallecidos dio la vuelta al mundo y ayudó a conocer a fondo a un club que se caracteriza por no ser precisamente un club de fútbol normal y corriente. Su rol durante la República Demócrata de Alemania, donde fue punto de encuentro para punks, rebeldes y antisistemas, su alternativismo y su política a favor del aficionado le convierten en una entidad encomiable. Y no desde ayer. Lleva años vendiendo entradas por menos de veinte euros y llenando su estadio con el simple propósito de cantar villancicos. Gracias a su nueva fama, el ADN del mítico Union dará la vuelta al mundo.