El Alavés inscribe a 22 futbolistas, seis se quedan sin dorsal
Algunos futbolistas saldrán cedidos, otros podrían recalar en el filial y Muñoz, en principio, recuperará su status en la primera plantilla.
El Alavés ha realizado una pretemporada con overbooking. Más de 30 jugadores bajo la batuta de Asier Garitano lo cual ha permitido un alto nivel de trabajo en las sesiones de entrenamiento desde el principio pero, también, una acumulación de efectivos en el momento final. Los de Mendizorroza destinaron 22 dorsales a sus futbolistas para el primer partido y, hasta el 2 de septiembre, se prevén salidas y entradas. Los nombres van a ir variando hasta el último momento.
Se quedaron sin número Javi Muñoz, Verdon, Fuchs, Saúl, Rafa Navarro y Dani Torres (este último lo tiene pero por ley, no porque cuente). Ya han salido de la entidad Anderson, Diéguez y Twumasi. A partir de ahí, cada uno vive una realidad diferente. Javi Muñoz, en principio, seguirá con la primera plantilla. De hecho, la previsión es que tenga el número 15 a la espalda. Pero ante el Levante se le vio en la grada acompañado de su novia. Verdon y Fuchs apuntaan a una cesión en Francia, Saúl irá a un Segunda español, Rafa Navarro podría salir o reforzar el filial y Torres apunta al Oviedo. Traspasado. Mantiene su número del año pasado (16) pero por imperativo legal. Hasta que no salga de la entidad, tiene derecho al mismo. Pero su futuro en la plantilla es nulo.
El otro día jugaron Pacheco, Martín, Ely, Maripán, Duarte, Manu, Pina, Wakaso, Vidal, Rioja y Joselu. Salieron desde el banquillo Pons, Tachi y Lucas Pérez. También tienen dorsal asignado y completaron la convocatoria Sivera, Adrián Marín, Guidetti y el canterano Borja Sáinz. Los cuatro restantes (para completar la cifra de 22 que inscribió el Alavés en Madrid) son los lesionados Laguardia, Ximo Navarro, Burgui y el joven Demirovic. Parece que, al final, el bosnio se queda en Vitoria. Si regresa, por ejemplo Calleri, podría caer al Segunda B. La Dirección Deportiva lo quiere cerca de Vitoria para ir puliéndolo poco a poco.