La derrota ante el Sevilla pone fin a tres rachas de mérito
El Espanyol no perdía en su debut en LaLiga en casa desde la 07-08, acumulaba 13 encuentros oficiales seguidos sin derrotas y Gallego cayó al décimo partido.
La carta de presentación del Espanyol en LaLiga no pudo ser la mejor. El equipo de David Gallego se vio superado por el Sevilla y perdió en su debut en casa, algo que no sucedía desde la temporada 2007-08 con Ernesto Valverde en el banquillo. En aquel encuentro, los blanquiazules se vieron sorprendido por el Valladolid, que se llevó los tres puntos de Montjuïc como un año antes lo había hecho el Nàstic, por 0-1.
Dos derrotas que significaron una anécdota en ambas campañas: en la 06-07 el Espanyol acabó disputando la final de la UEFA y en la primera vuelta de la campaña 07-08 dejó a un equipo entre los cuatro mejores del campeonato. Eso espera este Espanyol, que ha ido solventado el resto de estrenos en casa desde entonces. En la 08-09 tuvo la revancha ante el Valladolid (1-0), en la 10-11 goleó al Getafe (3-1) y en la 15-16 se impuso al mismo rival por 1-0. El resto de estrenos en LaLiga se produjeron lejos de casa.
La derrota también pone fin a casi cinco meses en los que el Espanyol no se había amargado con la derrota. Desde el derbi en el Camp Nou del 30 de marzo, que finalizó 2-0, el equipo había sumado una racha de nueve victorias y cuatro empates, la que llevó a clasificarse en séptima posición la temporada anterior y la que le ha llevado a la cuarta y última ronda de la Europa League a la espera de entrar en la fase de grupos tras medirse al Zorya.
Para colmar las estadísticas del primer encuentro, David Gallego sufrió su primera derrota oficial con el primer equipo en su décimo partido, después de haber sumado hasta la fecha ocho victorias y un empate entre los cinco encuentros dirigidos al final de la campaña 2017-18 y los de este curso.
