El Celta vuelve a apostar por la ganadería uruguaya
Toro Fernández toma el relevo de Maxi Gómez como socio de Iago Aspas en el club olívico. Costó casi lo mismo que su compatriota.
Maxi Gómez, el socio de Iago Aspas en la delantera durante las dos últimas temporadas, ha sido el negocio más rentable de la historia del Celta. Lo fichó por 4,5 millones de euros y se lo vendió este verano al Valencia en una operación que rondó los 30 'kilos'. Para suplir la baja del 'Toro de Paysandú' el club vigués ha vuelto a apostar por la ganadería uruguaya de arietes.
Gabriel 'Toro' Fernández se ha incorporado a las filas del conjunto celeste procedente del Peñarol, que ingresó 4 millones de euros por el traspaso. Las similitudes son constantes entre los dos puntas charrúas. Ambos se formaron en la cantera del modesto Defensor Sporting de Montevideo y comparten estilo dentro del terreno de juego. Corpulentos, potentes y rematadores natos. "Son delanteros parecidos, con gran aporte físico", comenta su compatriota Lucas Olaza.
A diferencia de Maxi, Fernández aún no se ha estrenado como internacional. Su progresión se vio cortada hace dos años cuando en el reconocimiento médico con el Gremio brasileño le detectaron una grave lesión de rodilla.
Este artillero, que idolatra a Luis Suárez, regresó con fuerza tras su paso por el quirófano, pero un delicado asunto extradeportivo puso en peligro su segundo intento de probar suerte fuera de su país. El pasado 29 de diciembre atropelló a una mujer y la víctima todavía continúa en coma.
La justicia uruguaya lo imputó y le retiró el pasaporte. Fernández no pudo jugar con el Peñarol los partidos de la Copa Libertadores fuera de 'El Paisito'. Para evitar la vía penal negoció con los familiares de la víctima y el acuerdo se alcanzó en junio por una cantidad próxima a los 800.000 dólares. Justo a tiempo para iniciar la pretemporada con el Celta.
La puesta a punto del Toro a las órdenes de Fran Escribá se vio interrumpida a finales de julio por un viaje a Uruguay para zanjar los trámites judiciales. Solo ha podido disputar 45 minutos en los amistosos y aún no ha jugado al lado de Aspas. El charrúa apuntaba al banquillo hasta que se lesionó Santi Mina. Una situación idéntica a la de Maxi, que hace dos años entró en el once de la primera jornada por un contratiempo de John Guidetti. Aquel debut se saldó con un doblete del ahora delantero del Valencia.