"Necesito minutos para coger ritmo y confianza"
Grippo reapareció el pasado sábado nueve meses después de su lesión de rodilla. Espera estar al mejor rendimiento posible al inicio de la Liga, aunque reconoce que "aún queda mucho trabajo por delante".
—¿Qué sintió al reaparecer nueve meses después de su lesión de rodilla?
—Fue un paso importante, pero aún queda mucho trabajo por delante. Estoy contento por este primer pasito. Estoy en los tiempos previstos porque tras la operación ya me dijeron que me iba a costar recuperarme entre seis y nueve meses y que los nuevos estudios dicen que mejor nueve que seis, así que me he planificado con este tiempo. Soy positivo y estoy muy contento por cómo está yendo todo.
—¿Llega a tiempo para estar disponible de cara al primer partido de Liga?
—Aún me queda mucho trabajo por delante y necesito minutos para coger ritmo y confianza. Espero estar al mejor rendimiento posible cuando empecemos, pero hay que ir viéndolo en el día a día.
—¿Qué sensaciones tuvo en esos primeros minutos en Tarragona?
—Es importante que ya me olvide de la rodilla, así fue y eso creo que es una muy buena señal. Ahora toca coger ritmo, intentar jugar muchos minutos y estar a tope lo antes posible.
—Clemente también viene de un año en blanco por una lesión de rodilla, Guitián aún no se ha podido ejercitar con el grupo, Atienza tuvo que ser sustituido con molestias musculares… ¿Todos estos problemas en el centro de la zaga aceleran de alguna manera el proceso?
—Los planificamos muy bien antes de la pretemporada y hasta ahora el plan está funcionando muy bien. La situación de mis otros compañeros es la que es, pero esperamos recuperarlos lo antes posible porque cuando estén todos bien estoy seguro de que le pueden echar una mano al Zaragoza.
—¿Cuál fue su peor momento a lo largo de estos nueve meses?
—Me lesioné un sábado y las pruebas las tenía el lunes por la mañana. En ese momento se me cayó el mundo encima. Un momento complicado también fue desde que sufro la lesión hasta que me opero, ya que tienes que entrenar para mantener tono, pero al mismo tiempo sabes que vas a pasar por quirófano. Desde que sales del quirófano ya sabes que tienes que empezar a pelear otra vez porque no queda otra.
—Cuando llegó Guitián tuvo que cederle el seis. ¿Lo va a recuperar o se va a quedar con el 23?
—Tras el primer año pregunté si podía cambiar, pero los dos números que quería ya tenían dueño. Seguí con el seis y cuando vino Guitián, me lo pidió y ningún problema. El 23 me gusta, pero no es algo importante.
—¿Qué le parece el equipo que ese está confeccionando?
—Después de la temporada pasada es muy importante que vuelva la ilusión, pero lo más importante es notarlo en los entrenamientos, ver que la gente tiene ganas de cambiar lo que sucedió el año pasado. Yo eso lo noto. La gente nueva que ha venido es gente que quiere ganar y eso se nota en los partidillos. Eso nos hace mejores. El fútbol que vamos a intentar jugar es mucho más intenso, con más profundidad, y eso es mucho más apto para estar arriba. Estoy totalmente convencido con este tipo de fútbol. Los dos equipos que ascendieron directamente jugaban de forma similar. Es un fútbol que va a triunfar en esta Liga. Ahora nos toca a nosotros desarrollarlo en el campo, ya que no es algo que se hace en una semana.
—En los minutos que jugó en Tarragona lo hizo junto a Atienza. ¿Qué tal se entendieron?
—Muy bien. Me parece un jugador muy bueno y que nos puede echar una mano a todos con su experiencia y personalidad. Me gustó mucho porque habla mucho, hay mucha comunicación en el campo y yo creo que nos va a ayudar.
—Ya hay más de 23.000 abonados. ¿Les sigue sorprendiendo la respuesta de la afición?
—Es mi tercer año y cada temporada la afición está ahí. En este vestuario sólo puede haber agradecimiento y ojalá que podamos devolver toda esta confianza en el campo porque yo creo que toda la ciudad se lo merece.