Rosales decide para el Leganés su test más serio del verano
Los pepineros vencieron al Amiens en un derroche de seguridad defensiva. Rosales marcó el golazo del triunfo. Continúa la imbatibilidad blanquiazul: cuatro victorias, dos empates.
El Leganés venció al Amiens (0-1) en el penúltimo amistoso pepinero de la pretemporada. Era este test en tierras francesas la prueba más seria del verano para los de Pellegrino. Por el rival (un Primera galo), por el escenario (un estadio en la presentación de los suyos) y por estar a las puertas del arranque de Liga. Lo superaron con nota y con, sobre todo, derroche de las señas de identidad que gusta exhibir al Falco en su repertorio. Seriedad defensiva, solidaridad en bloque y tino en punta tiñeron esta victoria que, además, perpetúa la imbatibilidad blanquiazul en lo que llevamos de verano: cuatro triunfos y dos empates. El gol (golazo) de la victoria lo marcó Rosales en el 81’.
Repitió Pellegrino (salvo Cuéllar por Soriano) el once que jugó el último amistoso en Tánger. Equipo blindado por sensaciones de titularidad a falta de saber qué sucede con En Nesyri. Si el marroquí permanece en Butarque podría desplazar a Sabin Merino de esta alineación que, salvo tal hipotético cambio, se intuye fija para el debut liguero ante Osasuna. Escuadra sin apenas variaciones, por cierto, con respecto al curso pasado. Marc Navarro es la única cara nueva. Cara fresca y con bríos enérgicos. Su carril reluce desparpajo. Apuntas excelentes maneras el catalán.
Fiel a esta filosofía continuista, en Amiens se comportó el Lega como ese bloque que tiene en el "defenderás por encima de todas las cosas" su primer mandamiento. Receta de éxito que en Francia sumó algo de presión alta y cierta posesión prolongada. Faltó, eso sí, chispa en punta. Cosas del verano. Sin fisuras atrás, faltaba por ver las que encontrarían Braithwaite y Sabin en la proximidad del área gala. Hubo pocas ocasiones, pero en todas estuvo éste último, meritorio aferrado a una buena pretemporada para exigir un puesto relevante en la plantilla. Su cabezazo a córner de Óscar en el 40’ fue la ocasión más clara de la primera parte. Paradón de Gurtner.
Consumidas las fuerzas, fue la segunda mitad un asunto de combinaciones anómalas. Entre la ortodoxia defensiva y los desajustes individuales se movió la reanudación. El Amiens gestó mayor pálpito de peligro (Soriano tuvo un par de buenas intervenciones), aunque las oportunidades más claras brillaron de verde pepinero.
Rubén Pérez y Marc Navarro rozaron el gol antes de que Pellegrino agitara la pizarra para dibujar un 5-4-1 más sólido, y algo más vertical. Arnáiz avisó antes de que Rosales clavara con la zurda un golazo de videoteca (81’). El venezolano marcó su segundo tanto de pepinero con un zapatazo desde el pico del área del Amiens que se coló en la escuadra y puso broche a una nueva exhibición de seriedad del Leganés.