Borja: "Pensaba que a estas alturas estaría todo solucionado"
El exjugador está inmerso en su primer verano sin entrenar y con el enfado porque aún no se resolvió su supuesta implicación en el caso Oikos.
Borja Fernández está viviendo un verano extraño, diferente. No sólo por ser el primero en el que no está preparando la temporada que viene (hoy se pasó a ver a los que ya son sus excompañeros), sino por no sentirse aún libre de sospecha por el Caso Oikos. En declaraciones a Ser Valladolid, el orensano señalaba que "es un verano raro. La opinión pública si que se ha calmado, pero yo esperaba que todo fuera mejor, que ya se hubiese aclarado todo el asunto, que se hubiese solucionado. Yo soy la única persona que sé a ciencia cierta que no hay nada. Sigo pagando el pato de algo que no tenía que haber ni empezado. Lo último que sé es que habían adelantado unas declaraciones en las que no estaba citado ni yo, ni nadie del equipo, lo cual es revelador".
El exfutbolista se mostró molesto con "el sensacionalismo de algunos medios" por como trataron todo el asunto y, sin embargo, afirmó que "ahora es cuando más enfadado estoy porque vas viendo y te vas enterando que les da igual mi persona, que me detuvieron con la esperanza de ver si sabía algo y sino, pues mala suerte. Me indigna porque yo tenía que estar ahora con mi nueva vida, con mi nuevo contrato, mis nuevas funciones en el club (iba a ser el enlace con la plantilla y se iba a integrar en la dirección deportiva)" y explicó: "Los máximos culpables, la policía, no va a pagar por lo que me hicieron, con decir que se equivocaron...".