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VALENCIA

Parejo: "En otras etapas del club, Marcelino ya no estaría"

Sobre una posible marcha de Rodrigo: "Cuando acabó la temporada sí le veía opciones de salir... ahora no. Le veo centrado, a gusto aquí".

Suiza
Dani Parejo, en Crans Montana,
DIARIOAS

Dani Parejo reflexionó sobre el pasado, presente y futuro del Valencia horas antes de regresar a Valencia. Lo hizo con la prensa escrita desplazada a Crans Montana. El capitán, que cumple su noveno curso deblanquinegro, se ve retirándose en Mestalla. "El Valencia me lo ha dado todo".

Cuando uno de viene de ser campeón, ¿cómo se afronta un nuevo año?

Con la mente puesta en intentar hacerlo mejor. El fútbol no tiene memoria, vive del presente. Esto es el Valencia, un club muy exigente.

El mensaje que lanza como capitán es que prohibido relajarse.

Ese es el mensaje. Fue un año tan bonito, desde enero hasta mayo disfrutamos muchísimo todos, hay que valorar lo que hicimos. Se cambió una dinámica negativa, mala, el equipo supo levantarse y creer. Pero ahora es el momento de ir a más. No hemos hecho nada. Por suerte o por desgracia en el fútbol, como en todos los deportes, o das el cien por cien o en un día lo que conseguiste lo tiras por la borda.

¿La final de Sevilla rompió una barrera psicológica?

Es verdad que cuando ganas títulos o partidos importantes contra equipos de un nivel importante, la autoestima, la confianza y el creer en nosotros por supuesto que aumenta.

“Me niego a dar por perdida la temporada”. Su tuit de enero acabó siendo una premonición y una de las frases del año del Centenario.

Veía a mis compañeros, a mí, al cuerpo técnico, la ambición que teníamos, cómo entrenábamos, el compromiso que teníamos y era difícil que no fueran mejor las cosas. Estadísticamente, en todos los partidos, éramos mejores que el rival, éramos superiores. La clave es que el equipo nunca se cayó, siempre creyó, a pesar de que Valencia es una plaza difícil porque es un club muy exigente, pero pudimos sacar un año histórico para todos.

La exigencia de Mestalla, ¿un plus o un freno?

Cuando juegas en un club grande, las expectativas siempre son muy altas, que es lo que pasa en Valencia. Yo hubo años en los que lo pasé muy mal, pero siempre he confiado en mí, en mi forma de jugar, mi forma de entender el juego. He tenido siempre personalidad para hacer lo que a mí me gusta, o jugar como yo entiendo el fútbol. Al final el trabajo tiene su recompensa. Pero también se nota cuando Mestalla aprieta y está con el equipo. Ahí están todos los domingos 40.000 personas. Para mí eso, chapeau… y el adiós que me dieron en Sevilla, inolvidable.

¿Qué recuerda?

Cuando me cambian en Sevilla, cuando no podía continuar, ver a toda la grada coreando mi nombre fue una cosa increíble… Luego ya toda la celebración, la cantidad de gente, niños, personas mayores, todas las calles llenas, la cara de felicidad de la gente… han sido los días más felices de mi carrera como futbolista.

¿A partir de qué momento siente que usted, de verdad, asume galones en el Valencia?

Con la confianza que siento de mis compañeros, del cuerpo técnico, del club. Esa confianza me ayudó. También que mi familia es feliz en Valencia. Todo eso se acaba notando en el campo.

Esa confianza de Marcelino usted se la devolvió con un respaldo público.

En los momentos malos es cuando hay que salir, remar y dar la cara. Yo viví lo que vivió el míster en esos meses, no en una ocasión ni en dos sino en alguna más. Sé cómo se está en esos momentos malos, en el día a día, y cómo lo sufre tu familia. Me salió de dentro ir a darle un abrazo tras el gol del Valladolid. Sabía que necesitaba muestras de cariño.

Ese tipo de gestos tuvieron su peso a la hora de que el club no tomara otro tipo de decisiones.

Hay que dar las gracias al club, a Mateo Alemany o Pablo Longoria, por la confianza que depositaron en el cuerpo técnico. En otras etapas en el Valencia hubieran echado al míster. Gracias a la confianza de ellos y al trabajo del entrenador se pudo ver que la culpa no era del míster sino que en ocasiones entras en dinámicas que no son buenas. El tiempo dio la razón y se acertó manteniendo al míster.

¿El fuerte del Valencia es la continuidad?

A mí me parece perfecto.. Todos los veranos hay movimientos, es lógico, pero la clave es mantener la estructura en la que el míster se suele basar por su juego, por su forma de verlo. Llevamos dos años con el míster y mantener la columna es importante. Obviamente cuando haces temporadas como la que hicimos, quizás es más difícil mantenerlo, porque llegan otros equipos y quieren fichar gente. Pero es importante tener una base mecanizada.

En este sentido, ¿confía en tener a Rodrigo a su lado todo el año?

Yo a él le veo bien. Quizás cuando acabó la temporada sí que veía alguna opción de que pudiera salir a un grande pero a día de hoy… No he hablado con él, pero le veo centrado, a gusto aquí. Es un jugador Top y una excepcional persona.

Por usted este año si no se habla de ofertas ni de opciones de salida.

Mejor, un verano tranquilo viene bien de vez en cuando (ríe). Estoy muy feliz, mi familia también. Estoy en un club Top y mucha gente firmaría jugar en el Valencia nueve temporadas como voy a cumplir yo. Es un orgullo y ojalá pueda estar muchas más.

¿Se ve retirándose en el Valencia?

Pues sí. El club está en una línea en la que me veo identificado. Con Mateu, con Pablo… Hay una estabilidad, una línea hacia donde ir y dónde queremos llegar. Además Valencia es una ciudad increíble, le encanta a mi familia, y estoy en un club Top.

Usted también está a un paso de entrar en el Top en muchos registros históricos: más partidos jugados, más minutos, más victorias… A este paso le ponen una lona en Mestalla.

No lo sé (ríe). Para mí sería un orgullo, por supuesto. Le debo todo al Valencia, que me ha dado la posibilidad de jugar y por lo que he vivido aquí. Llevo nueve años de profesional en el club. Sería un orgullo tener un lugar en la gran historia del Valencia.

¿Hubiera apostado hace cinco años a que llegaría a nueve temporadas en el Valencia?

No. Hubo una fase en la que por circunstancias yo quería salir. Pero siempre he dado lo máximo de mí y lo voy a seguir haciendo hasta que no juegue más aquí. Salvo dos años que estuve en Getafe y unos meses en el Madrid, toda mi carrera ha sido en el Valencia. Le tengo que dar las gracias, le debo mucho, no es sencillo estar nueve temporadas en un club como el Valencia. Para mí es un orgullo.

Es el único futbolista que lleva más tiempo que Peter Lim en el Valencia.

La verdad es que podría escribir un libro. Tengo anécdotas buenas, menos buenas… No sé la cantidad de compañeros con los que he jugado y también de entrenadores que he tenido.

Ahora sin embargo del Valencia no se quiere ir nadie…

Cuando el club entra en una dinámica como en la que estamos desde que llegaron Mateu (Alemany) y el míster, al final se nota. Cuando juegas dos años seguidos Champions, y ojalá volvamos porque ese es el objetivo, eso es lo que te da. La gente no se quiere ir de aquí y hay gente muy buena de fuera que ahora quiere venir al Valencia. Estar en Champions te da un plus.

Uno de los que parece que quieren llegar al Valencia es Rafinha, que llegaría para, entre otras labores, dosificarle a usted.

Cuantos más jugadores de más calidad puedan venir al Valencia a ayudarnos a conseguir nuestros objetivos, mejor y bienvenidos sean. Estoy abierto a esa posibilidad. El fútbol es fútbol y la élite es así. Donde hay competencia siempre se saca más jugo y sería bueno para todos. De Rafinha recuerdo sus temporadas en el Celta y me parece un magnífico futbolista.

¿Pero usted se ve capacitado para volver a jugar la cantidad de minutos que jugó el curso pasado?

Es verdad que la temporada pasada es la que más he jugado, fueron más de 5.000 minutos en total. Estoy contento, a mí me gusta jugar y si pudiera jugaría todos los partidos. Al final no hay secreto, es comer bien, cuidarse mucho la comida y descansar. No sé si también mi genética me permite jugar muchos partidos sin lesionarme y ojalá que dure. Al final discuto con mi mujer porque a ella le gusta salir a pasear y a mí me gusta estar en casa, viendo el fútbol. Descansar forma parte del entrenamiento.