Preparados para la batalla

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Francia busca que hoy se cumpla el dicho de que a la tercera va la vencida... Y España está preparada para evitarlo. Esta eliminatoria se ha convertido en un clásico para la generación del 2000 de ambos países. En 2017, en categoría Sub-17, se vieron las caras en los cuartos de final de la Eurocopa y en los octavos del Mundial: victoria para La Rojita en ambos casos (3-1 y 2-1). En las dos ocasiones los franceses llegaban tras arrollar en la fase de grupos y los de Santi Denia, entonces seleccionador de la Sub-17, les compraron el billete de vuelta a Francia en un duro golpe de realidad.

Ahora se cruzan en semifinales y, aunque los franceses han cambiado muchos jugadores, siguen teniendo el mismo faro: Caqueret, un centrocampista al que le iría como un guante el estilo español. Es bajito, muy técnico y tiene una cualidad que a veces les cuesta adquirir a los medios de Francia: piensa el pase que va a dar antes de controlar la pelota. Eso le convierte en el cerebro de su selección. Si Orellana y Moha le anulan (Antonio Blanco es baja por sanción), La Rojita tendrá mucho terreno ganado.

España, por su parte, ha cambiado poco con respecto a aquella Sub-17. Bryan Gil, del 2001, es el único 'nuevo' que ha logrado hacerse un hueco en el once. No es un asunto menor: el extremo del Sevilla aporta desborde, profundidad y ha sido uno de los más destacados en la primera fase.

Además de los precedentes en Sub-17, la última vez que España fue campeona Sub-19, en 2015, eliminó a Francia en semifinales. Era la generación de los Rodrigo, Ceballos, Asensio, Mayoral... La gran estrella era Asensio, recién fichado entonces por el Madrid, y el balear se lo dejó todo para las semifinales: dos golazos sentenciaron a Francia. El mismo camino quiere seguir Ferran Torres. El del Valencia es el gran referente de esta generación y aún no ha visto portería en el campeonato. Ha dejado buenos partidos, especialmente los dos primeros, pero está mentalizado de que ha llegado su hora. Semifinales, Francia, una Eurocopa... Es el momento para que dé un paso al frente.

Especial importancia tendrá también el banquillo, ya que la velocidad de Mollejo y Barrenetxea puede desequilibrar en los minutos finales. Hoy cada detalles es importante...