¿Necesita realmente fichar el Liverpool este verano?
La realidad es concreta: el Liverpool no está fichando, y los rumores que rodean al club tampoco son abundantes. Pero, ¿necesita fichar?
El Liverpool está viviendo un mercado de fichajes muy tranquilo. El joven Sepp van den Berg ha llegado a las filas Reds procedente del PEC Zwolle por algo menos de 2 millones de euros en un traspaso que muchos no consideran siquiera un fichaje, ya que seguramente dispute la próxima temporada en el equipo U23 del Liverpool.
El verano transcurre tranquilo a orillas del río Mersey. En Inglaterra, en general, pero también en unos aledaños de Anfield que ha creado un doble debate en torno a una misma idea: ¿debe reforzarse realmente el Liverpool? Por un lado, los aficionados que apoyan la idea de que tienen una plantilla competitiva y no es necesario. Por otro lado, los seguidores que piden refuerzos para recargar la barra de la ilusión de cara a una temporada que se presenta apasionante en la zona Red de la ciudad de Liverpool.
La realidad es concreta: el Liverpool no está fichando, y los rumores que rodean al club tampoco son abundantes. Pero, ¿necesita fichar?
Tridente mágico: Salah-Firmino-Mané.
Seguramente, el Liverpool tiene uno de los mejores tridentes del fútbol inglés y europeo. El ataque formado por Mohamed Salah, Firmino y Sadio Mané ha demostrado ser un auténtico quebradero de cabeza para los equipos rivales en las dos últimas temporadas y, salvo sorpresa mayúscula, seguirá siendo la gran baza ofensiva de los de Klopp. Un tridente que asegura goles y rendimiento a lo largo y ancho del calendario anual es un argumento muy a favor del equipo. Pocos equipos en el planeta pueden equipararse en este aspecto a los de Anfield.
Virgil van Dijk, considerado uno de los mejores centrales del mundo.
Es uno de los mejores fichajes del Liverpool en la última década. Llegó cuestionado y con presión por la enorme cantidad de dinero que pagaron al Southampton por su fichaje, pero año y medio después desde su llegada pocos, o nadie, hablan de ello. Central de garantías plenas, consagrado, de una seguridad aplastante y considerado por muchos el mejor defensa del momento. Un seguro de vida a la hora de defender.
Tienen un portero de primer nivel como Alisson Becker.
Otro de los puntos clave de este Liverpool. Junto al fichaje de van Dijk, seguramente el fichaje de Alisson procedente de la Roma tuvo, además del precio elevado, mucha similitud al defensa neerlandés. Uno de los mejores porteros del planeta que ha sabido rendir más allá de las etiquetas, opiniones y demás debates. Más allá de sus fantásticas actuaciones con paradas de mérito recordadas en Anfield, sus cifras bajo palos se han convertido en uno de los seguros más fiables del rendimiento del equipo. La cifra de goles encajados se ha complementado con otro dato demoledor como son las veces que el Liverpool ha dejado su portería a cero. Un fichaje que ha cerrado, tras años de dudas e incluso preocupación, el debate de la portería.
Laterales en estado de gracia: Alexander-Arnold y Robertson.
Una de las grandes revoluciones de las dos últimas temporadas en el Liverpool. Dos jóvenes valores que han conseguido consagrarse en el primer nivel competitivo. Uno canterano, Alexander-Arnold. Otro fichado, Robertson. Pero ambos convirtiéndose en piezas claves para que el dinamismo, la electricidad y el ritmo casi huracanado que impone el equipo sea, también, efectivo en el juego exterior. Quizas, dos de los mejores laterales del fútbol británico en la actualidad.
Un entrenador de nivel con Jurgen Klopp.
El técnico alemán ha conseguido unir de forma óptima, productiva y afable su personalidad con un rendimiento deportivo a la altura de la potencia histórica que dirige. Uno de los mejores entrenadores del mundo que, tras brillar hace años en Dortmund, ha conseguido a base de confianza y tiempo hacer de este Liverpool un equipo altamente competitivo. Las grandes citas, tanto a nivel doméstico como continental, son uno de sus mayores y más eficientes argumentos. Con la Champions League lograda la pasada temporada ha conseguido sellar de forma oficial sus dotes técnicas en una de los países futbolísticamente más románticos y pasionales.
Son campeones de Europa y subcampeones de liga con 97 puntos.
La temporada 2018/19 quedará en el recuerdo de los aficionados Reds durante décadas. Coronados campeones de Europa en el Wanda Metropolitano contra el Tottenham y subcampeones de una de las más emocionantes Premier League que se recuerdan. Un curso deportivo que estuvo a la altura de muy pocos clubes en el mundo. El reto de superarla se presenta prácticamente imposible, pero debe de convertirse en una base sólida para tener la confianza de que cumplieron con creces. Son uno de los claros equipos a batir tanto en territorio insular británico como en territorio del viejo continente. El reto será no dejar que esa confianza y seguridad no se traduzcan en tranquilidad y desconexión.
Sus rivales no se están reforzando como otros años.
Una de las críticas hacia el verano del Liverpool está enfocado en su mercado de fichajes. Voces sabias del lugar, y extraños, afirman que está mostrando demasiada calma, pero realmente pocos son los clubes que realmente están haciendo grandes inversiones este verano, a nivel general, en la Premier League. El campeonato inglés, lejos de lo ofrecido y vivido los últimos años, no está destacando por su potencial económico. Ningún equipo del Big Six de la Premier League está reforzándose de forma notoria, sobre todo a nivel de volumen. Un Manchester City que cuenta con una situación similar al Liverpool, un Manchester United que genera más dudas que confianza, un Chelsea sancionado y otros equipos como Arsenal (cerca de cerrar fichajes interesantes) y Tottenham (pocos fichajes, pero de garantías, como Ndombélé) que sí están queriéndose mover, pero sin extravagancias. Es un contexto generalizado en los grandes ingleses, y no tanto centralizado en el Liverpool. Es decir, no es un 'problema' exclusivo del Liverpool.
Es cierto que el Liverpool no está moviéndose demasiado en el mercado. Pero, ¿es necesario, tienen necesidad real o es más la necesidad de cumplir expectativas impuestas casi de forma automática porque el mercado está abierto?