Las 18 horas de Marcelino con Lim; conclusiones del cónclave blanquinegro en Singapur
Conclusiones de la reunión con el dueño: se tiene una base sólida y, salvo salidas de pesos pesados, los refuerzos que puedan aún llegar (central y medio ofensivo) serían complementos.
Marcelino viajó a Singapur para compartir con Peter Lim su visión del proyecto. Ese era el fin que buscaban Anil Murthy y Mateu Alemany al promover el cónclave en el país asiático. Fue un viaje relámpago e imprevisto a principio de semana. De hecho, se alteró la agenda personal de los actores que viajaron y también la social del club, sirva de ejemplo la presentación de Maxi Gómez. Pero el viernes era cuando Lim podía atenderles en Singapur y había interés en que el dueño escuchara de primera mano las inquietudes, virtudes y defectos que ve Marcelino en su plantilla, en el día a día del vestuario y en un proyecto que va por su tercer capítulo.
Fueron apenas 18 horas las que estuvieron en Singapur, menos aún las que compartieron con Lim. Pero tiempo suficiente, al menos en opinión de los implicados, para analizar lo hecho, lo que se tiene y a partir de ahí trazar la hoja de ruta para que el proyecto siga creciendo. Las principales conclusiones del cónclave son: primero, hay una base sólida de plantilla; segundo, la situación del Valencia en el mercado es más fuerte y tranquila que en los últimos dos años y, tercero, salvo salidas de alguno de los pesos pesados -que a día de hoy no se espera que haya- los refuerzos que puedan llegar serían de perfil complementario. De hecho, no se descarta que finalmente no llegue ningún otro fichaje, aunque la intención sí es la de reforzarse.
Sin ofertas por Rodrigo ni ningún otro futbolista importante
El Valencia a día de hoy no tiene ninguna oferta (interesante) ni negociación abierta para la salida de un peso pesado, llámese por ejemplo Rodrigo. En el club reina la seguridad de que el internacional continuará en el equipo. Solo si llega “la” oferta, como se enfatiza para remarcar lo selectivo que está siendo Rodrigo sobre su futuro, podría cambiar el panorama. Pero como viene informando durante todo el verano AS se cuentan con los dedos de una mano los clubes a los que Rodrigo diría “sí” y de momento ninguno ha movido ficha. Solo lo ha hecho en firme el Nápoles y el club italiano no está entre los elegidos por Rodrigo para cambiar de aires.
Lo mismo que sucede con Rodrigo pasa con otros pilares del Valencia campeón de Marcelino: los Gayà, Parejo, Kondogbia, Coquelin, Gabriel, Garay… A ello se suma también que el sentimiento de pertenencia es ahora, con el equipo en Champions y tras haber tocado metal, más fuerte de lo que era antaño. Dicho de otra manera, nadie quiere irse hoy en día del club. De ello también se habló en Singapur, recordando allí los presentes que hace dos veranos muchos eran los que querían abandonar un barco que había sido dos años seguidos 12º y cuando, entre llegadas y salidas, se realizaron 31 operaciones. Eso sí, hasta que al menos se cierre el mercado en la Premier (8 de agosto) no se confían en que no llegue una oferta.
Los esfuerzos en fichajes se han realizado con Cillessen y Maxi Gómez
Este verano el escenario es bien distinto. Con Cillessen y Maxi Gómez se han apuntalado las dos demarcaciones que eran necesarias y la fuerza del proyecto radica en la estabilidad y la continuidad. De ahí que se no esperen grandes movimientos y, como fuentes del club reconocen, no se hayan contemplado nombres como el de Nicolás Otamendi, un perfil de refuerzo (más allá de temas económicos) que haría tambalear el estatus de dos pilares que se consideran básicos, como Garay y Gabriel, y la proyección de Diakhaby, un futbolista del que se espera un salto cualitativo una vez transcurrida su primera temporada de adaptación. Es decir, por cuestión numérica puede llegar otro central, aunque más de perfil Roncaglia.
Cuarto punta: Sobrino, Manu y las opciones de Cheryshev o Guedes
Tampoco se ve necesaria la incorporación de otro delantero. Ahí sí se ha hecho un esfuerzo por un valor de presente y futuro como Maxi Gómez. En el análisis que se hizo en Singapur de la temporada pasada, se habló del problema de definición que afectó al equipo en la primera vuelta y de ahí el cambio Mina por Maxi. Pero se concluye que los registros de Rodrigo y Gameiro acabaron ajustándose a sus trayectorias y que la realidad de Valencia es más la de los 38 puntos de la segunda vuelta que los 23 de la primera. Además, en lo que a un cuarto delantero se refiere, otra de las conclusiones de la reunión es que Marcelino debe valorar y tomar una decisión sobre la capacidad de Sobrino y Manu Vallejo, sin olvidar que como alternativas de ataque para momentos puntuales de la temporada están Guedes y Cheryshev.
Proyecto económico de control del gasto y mayor margen de Fair Play
El proyecto deportivo, de talante continuista, va de la mano del económico. Ahí el club saca pecho y recuerda que los éxitos en el campo se traducen en mayores ingresos. La política económica, de la que se habló también en Singapur, pasa por controlar los gastos, de ahí que haya una línea roja en lo que a tope salarial se refiere. De hecho, aunque el margen de inversión en la plantilla por Fair Play Financiero va a ser superior al de antaño, la intención del club es no aumentar el coste de plantilla (lo que reducirá las necesidades de ventas).
No se habló de la renovación de Marcelino
De la situación contractual de Marcelino no se habló en Singapur. Entendían las partes que no era el momento ni el lugar ni el contexto. La reunión con Peter Lim se gestó para hablar del proyecto global y no de su caso particular. Marcelino, recordemos, tiene contrato con el Valencia hasta el próximo 30 de junio, es decir, hasta final de la temporada que arranca en agosto. Hace un año, cuando también le restaba solo uno de contrato (firmó inicialmente hasta 2019), el club le ofreció la renovación en el mes de mayo tras lograr la cuarta plaza. De momento, pese a repetir posición en Liga y conquistar la Copa, la continuidad del asturiano es un tema a tratar en otro momento.