El futuro de Stuani, Lozano y Doumbia aún está en el aire
Se espera que el uruguayo decida su futuro en breve una vez finalizada su participación en la Copa América. Le buscan una salida a Doumbia y con Lozano habría más paciencia.
La línea con más competencia, a fecha de hoy, en el Girona es la delantera. El conjunto rojiblanco cuenta con hasta cuatro futbolistas que pueden desenvolverse en la punta de ataque, pero tan solo Marc Gual tiene un hueco fijo en la plantilla del próximo curso. En cuanto al futuro rojiblanco de Cristhian Stuani, Seydou Doumbia y 'Choco' Lozano aún está en el aire.
En relación a Stuani, el Girona aún no ha recibido ninguna oferta formal por él de ningún equipo, pero no esconde que la espera. Es un delantero con cartel en Primera y el extranjero y se desea que, una vez ya ha finalizado su participación en la Copa América, decida su futuro. Eso sí, no hay un excesivo pesimismo en la entidad gerundense porque el punta le ha transmitido que una opción que baraja es la de continuar pese al descenso a Segunda. Se cuenta con él para que haga dupla con Marc Gual. Casos aparte son los de Doumbia y Lozano. Al primero se le está buscando una salida y con el hondureño tendrán más paciencia y será el técnico, Juan Carlos Unzué, el que decida si lo quiere en la plantilla o no.
En caso de que alguno de estos jugadores salga, el club ficharía. Eso sí, paciencia porque "no sabemos qué pasará. La evolución del mercado determinará el futuro y que lleguen más jugadores dependerá de las salidas", dijo Cárcel.
Marc Gual, una obsesión para Cárcel
Si alguien estuvo feliz este miércoles durante la presentación de Marc Gual fue el director deportivo del Girona, Quique Cárcel. Siempre ha querido contar con el delantero y, por fin, pudo cumplir su deseo. Gual llega como cedido una temporada por el Sevilla, pero se espera que eche raíces en Girona. Eso sí, para ello tocará ascender a Primera. Cárcel tenía una obsesión con Marc Gual y es que le lleva siguiendo muy de cerca desde que explotó con el Espanyol B en Segunda B. Lo quiso para cuando el Girona militaba en Segunda, pero el Sevilla se le adelantó y le colocó en su filial. El curso 2016-17 demostró en Segunda con los hispalenses, gracias a sus 13 goles, que estaba para más y Cárcel volvió a llamar a su puerta para que vistiera de rojiblanco en Primera. Pero fue imposible. Ahora ya está en Girona y Cárcel sonríe. Espera que sea uno de los abanderados que les devuelvan a la máxima categoría del fútbol español: "Hacía mucho tiempo que lo seguía y por fin hemos podido lograr su incorporación. Estoy muy satisfecho. Siempre me ha gustado", dijo.