La jugadora a seguir: Alexia, un Mundial para honrar a su padre

Alexia Putellas es una de las jugadoras más conocidas de la Selección. Lleva siendo fija con España desde hace mucho tiempo. A sus escasos 25 años, es una de las llamadas veteranas de La Roja. Pero no sólo es un referente hacia sus compañeras más jóvenes, lo es también para todas las niñas que hoy se inician en esto del fútbol.

Ella recuerda con nostalgia cómo fueron sus inicios. "Mis primeros recuerdos son en la plaza del ayuntamiento de mi pueblo, mientras me miraban mis padres sentados en un banco", admite. Ahora son miles de chicas las que intentan ser Alexia Putellas. En España, en Cataluña, en Barcelona y por supuesto en su tierra, Mollet del Vallès. "Yo era de las pocas, y ahora es todo lo contrario. El otro día me mandó un vídeo mi madre de un partido en la plaza y eran cuatro chicas con un chico. Mayoría. Las cosas han cambiado".

Alexia ha pasado de aquellos días a triunfar tanto en la Selección como en el Barcelona desde bien joven. Eso sí, llegar al primer equipo del club blaugrana no fue nada fácil. Se tuvo que ir de casa, al Levante, para poder dar ese salto de ser profesional. "No me costó porque era lo que debía hacer. Estaba segura de dar ese paso". De aquello sólo queda el recuerdo. Alexia viene de firmar su mejor temporada futbolística. Además, ha tenido la suerte de jugar una final de Champions y ahora de lucir en el Mundial. "Si echas la vista atrás, era impensable tratar de tú a tú a selecciones como Alemania", admite con orgullo.

Será uno de los peligros a los que tratará de neutralizar esta tarde la selección china. Rápida con el balón en los pies y, sobre todo, habilidosa, tanto que recuerda al mejor Andrés Iniesta. Completa su currículum gracias a su magnífico olfato goleador. Esta vez tiene claro a quién le dedicaría un gol en esta cita mundialista: a su padre, que falleció cuando era una niña: "Ojalá se lo pudiera dedicar. Fue un palo muy fuerte, como para cualquier persona. Él me inició en el fútbol, él me llevaba a los entrenamientos todos los días, por eso me encantaría que estuviese aquí", admite emocionada. Con esa fuerza de dentro intentará la jugadora catalana guiar a España hasta la victoria. Ella y el resto de las jugadoras de La Roja saben que el techo de este equipo está mucho más arriba que jugar tan sólo la fase de grupos. Entre otras cosas, por la unión y el poder de sacrificio de estas futbolistas desde que eran bien pequeñas. Alexia espera ser un fastidio por la banda para las rivales chinas. Ganas y talento no le faltarán, eso seguro.