"Me ficharon para que el Ludogorets corriera como el Atleti"

El nombre del Ludogorets no sonó con fuerza en el panorama del fútbol europeo hasta 2012, cuando este humilde equipo con sede en la ciudad de Razgrad, al norte de Bulgaria, ganó su primera liga y logró clasificarse para la fase previa de la Champions League. Era su primera temporada en la élite y casi ocho años después ningún equipo ha logrado arrebatarle el trono de la Parva Liga.

"Ha sido una temporada difícil, con luces y sombras, pero hemos mantenido al equipo campeón por octavo año consecutivo", valora Iván Infantes, que el pasado verano dejó de estar a la sombra del 'Profe' Ortega en el Atleti para dirigir la preparación física del Lugodorets. "Me fui por tres factores: el profesional, ya que no es lo mismo ser ayudante que primer preparador; el económico, porque teniendo toda la responsabilidad se cobra más, y el experimental", añade el español.

En su primera temporada en Bulgaria, Infantes ha añadido a su palmarés una Supercopa y una Parva Liga. "Con el Atleti ya logré una Supercopa de España, una Europa League y dos finales de la Champions, que no está nada mal". El preparador físico español desvela que en Razgrad las derrotas, e incluso los empates, "se encajan mal". "El Ludogorets es el club con mayor poder económico de Bulgaria y no se puede permitir dejar el más mínimo detalle al azar. No entienden el fracaso porque no están acostumbrados", completa.

En la primera de las tres temporadas que firmó con el Ludogorets, Iván Infantes ha tenido que adaptarse a cuatro entrenadores distintos: Dimitar Dimitrov, Paulo Autuori, Antoni Zdravkov y Stoicho Stoev. "Es una peculiaridad que conlleva cambios en la metodología. Llegué a pasar nervios porque teníamos una ventaja de ocho puntos y de los últimos 15 hicimos seis, pero los jugadores más veteranos me decían 'no te preocupes Iván, vamos a ganar la liga al 99,99%'. Me quedé sin uñas pero al final así fue".

Infantes define a su equipo como "el Madrid o el Barcelona de Bulgaria", aunque el propietario del club, Kiril Domuschiev, quiere que sus jugadores "corran como el Atlético de Madrid". "A mí me ficharon para eso y continuamente me preguntan si estamos entrenando igual que el Atleti. Me dicen '¿pero estos jugadores soportan las mismas cargas que los del Atleti?'. Todo conlleva un proceso de adaptación, pero el espejo en el que se mira el Ludogorets es el Atlético de Madrid", sentencia.